Amnistía Internacional, junto con otras organizaciones de derechos humanos y personalidades del ámbito académico, ha intervenido hoy ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos en relación con una demanda histórica sobre el cambio climático interpuesta por 6 jóvenes de Portugal contra 33 países europeos en la que presentan argumentos jurídicos para explicar por qué las políticas en materia de cambio climático de los gobiernos deben proteger los derechos de las personas que viven fuera de sus fronteras.
La crisis climática no respeta las fronteras y nuestras leyes y políticas deben reflejar esta realidad.
Ashfaq Khalfan, director del Programa de Derecho y Política de Amnistía Internacional
El Tribunal decidirá si acuerda seguir adelante con la demanda formulada no sólo contra Portugal, donde residen las personas demandantes, sino también contra otros 32 países, que incluyen los Estados miembros de la UE más Noruega, Rusia, Turquía, Suiza, Reino Unido y Ucrania.
“La crisis climática no respeta las fronteras y nuestras leyes y políticas deben reflejar esta realidad. Para garantizar la justicia para las personas más afectadas por las olas de calor, la sequía y los incendios forestales, hay que exigir a los Estados que aborden el cambio climático y su impacto tanto dentro como fuera de su territorio”, declaró Ashfaq Khalfan, director del Programa de Derecho Internacional y Política de Amnistía.
“A la hora de elaborar sus políticas en materia de cambio climático, los gobiernos no pueden seguir actuando como si las personas que viven fuera de sus fronteras no importasen”.
La demanda en la que interviene el grupo, Duarte Agostinho y otras personas v. Portugal y otras personas, fue presentada gracias a la financiación colectiva por 6 jóvenes de Portugal que acusan a 33 países europeos de violar sus derechos humanos, incluido su derecho a la vida, por no adoptar las medidas adecuadas para limitar las emisiones de gas de invernadero.
Para garantizar la justicia para las personas más afectadas por las olas de calor, la sequía y los incendios forestales, hay que exigir a los Estados que aborden el cambio climático y su impacto tanto dentro como fuera de su territorio.
Amnistía Internacional
“Las personas afectadas por el cambio climático deben poder demandar a otros gobiernos y no sólo al suyo. Si sólo se exige a los gobiernos que actúen en relación con los derechos de quienes viven dentro de sus fronteras, es más fácil que ignoren el impacto en quienes viven en los países más afectados y sean más lentos en su trabajo para reducir las emisiones de gas de invernadero”, dijo el profesor Mark Gibney, de la Universidad de Asheville en Carolina del Norte.
Si se permite que siga adelante, la demanda podría sentar un precedente importante y despejar el camino a otros pleitos sobre el clima basados en argumentos de derechos humanos.
“Este caso es también importante para garantizar que se exige a los gobiernos que elaboren políticas en materia de cambio climático de un modo que se reconozcan los riesgos climáticos concretos para los niños y niñas y tomen las ambiciosas medidas de protección del clima necesarias para salvaguardar sus derechos”, dijo por su parte Gamze Erdem Türkelli, de la Universidad de Amberes.
Si desean más información, pónganse en contacto con Ashfaq Khalfan, Twitter: @ashfaqkhalfan
Gamze Erdem Türkelli, Twitter: @GamzeErdmTrklli
Stefan Simanowitz: Twitter @StefSimanowitz
Si desean más detalles sobre la intervención, consulten:https://www.etoconsortium.org/en/news/news/first-climate-change-case-at-the-european-court-of-human-rights-justice-must-not-stop-at-borders-182/ . Pueden consultar la información presentada al Tribunal aquí.
Si desean más información sobre el caso, consulten: https://hudoc.echr.coe.int/eng?i=001-206535 y https://youth4climatejustice.org/the-case/.
Información complementaria
Las 6 personas que iniciaron este pleito —Cláudia Agostinho (21 años), Catarina Mota (20), Martim Agostinho (17), Sofia Oliveira (15), André Oliveira (12) y Mariana Agostinho (8)— demandan a los 27 Estados miembros de la Unión Europea y, además, a Reino Unido, Suiza, Noruega, Rusia, Turquía y Ucrania por no hacer recortes de emisiones más drásticos y urgentes para salvaguardar su futuro.
El grupo que ha intervenido hoy como tercera parte en la demanda está integrado por miembros del Consorcio ETO (Obligaciones Extraterritoriales de los Estados), que defiende los derechos más allá de las fronteras.
Incluye a las siguientes entidades y personalidades: Amnistía Internacional, el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), el Center for Transnational Environmental Accountability (CTEA), el Economic and Social Rights Centre (Hakijamii), FIAN International, Great Lakes Initiative for Human Rights and Development (GLIHD), el Grupo de Investigación sobre Derecho y Desarrollo de la Universidad de Amberes, el profesor Dr. Mark Gibney, la Dra. Gamze Erdem Turkelli, la Dra. Sara Seck, la profesora. Dra. Sigrun Skogly, el Dr. Nicolas Carrillo-Santarelli, el profesor Dr. Jernej Letnar Cernic, Tom Mulisa, el Dr. Nicholas Orago, el profesor Dr. Wouter Vandenhole y Jingjing Zhang.