Traigámoslas

#RefugeePromise

El 6 de marzo de 2017 va a pasar algo grande en Bruselas. Se reunirán cientos de personas para hacer una concentración de automóviles en una glorieta de la ciudad, en el corazón de la UE, y mostrar a los líderes de la Unión que van en serio con su compromiso de dar la bienvenida a las personas refugiadas.

Hace más de un año que los líderes de la UE prometieron reubicar a algunas de las decenas de miles de solicitantes de asilo atrapados en Grecia, pero hasta ahora siguen sin cumplir la mayoría de sus promesas. Mientras tanto, muchos de estos hombres, mujeres, niños y niñas viven en condiciones inhumanas a las puertas de Europa, el lugar al que llegaron para pedir refugio.

Esta no es la Europa en la que queremos vivir; podemos hacerlo mejor.

Así pues, cientos de personas se están dirigiendo en sus automóviles a Bruselas, para ofrecerse a llevar en ellos a su país a personas refugiadas, si eso es lo que hace falta.

Los ciudadanos y ciudadanas de a pie muestran de nuevo la solidaridad de la que carecen los líderes de la UE y su firme compromiso de dar la bienvenida a las personas refugiadas.

Fotis Fillipou, Amnistía Internacional

Promesas incumplidas

Hasta la fecha, los líderes europeos han incumplido sus promesas de trasladar a personas refugiadas desde Grecia a sus países. Ahora, personas de toda Europa les demuestran que están dispuestas a tomar las riendas para darles la bienvenida.

La concentración de automóviles

Let’s bring them here es una iniciativa popular emprendida por un pequeño grupo de ciudadanos y ciudadanas europeos que no podían seguir ignorando la situación de las personas refugiadas en Grecia.

Empezó el año pasado como un desfile de automóviles en los Países Bajos, en el que la gente que participó condujo más de 350 vehículos hasta La Haya para ofrecerse como “conductores oficiales” para ayudar en la reubicación.

Tras el éxito de esta iniciativa, el 6 de marzo de 2017, conductores y conductoras de toda Europa se concentrarán delante del Consejo de la Unión Europea para ofrecerse como chóferes para ayudar a reubicar a las personas refugiadas atrapadas en Grecia.

No es sólo un gesto simbólico, sino una vehemente exigencia a los líderes europeos que les hace su propia ciudadanía para que acojan a las personas refugiadas y que éstos no podrán ignorar.

La historia de la hermandad de mujeres yazidíes

Estas mujeres yazidíes —Kurtey, Karmey, Noorey, Beshy y Bahar— viven juntas en Grecia desde hace más de un año. Cuando residían en los campos tenían miedo, así que crearon un “círculo de protección” para cuidarse mutuamente.

Cuando huyeron de las garras del grupo autodenominado Estado Islámico, que se extendió en el norte de Irak hace dos años, pusieron su fe en la protección de Europa.

Cruzamos el mar porque sabemos que aquí hay humanidad.

Kurtey

Viajaron juntas, divididas en grupos por los contrabandistas. Bahar tiene tres hijas a las que no ve desde hace tres años, pero espera reunirse con ellas en Alemania.

El hermano y el hijo de Noorey están en Irak, pues no tenían dinero para hacer el viaje.

Las mujeres dicen que no hay atención médica suficiente en Grecia. Tienen un intérprete, pero es otro dialecto kurdo, por lo que no entienden todo.

Pero lo que más les preocupa es la falta de educación para sus hijos e hijas.

“Anhelo una escuela para todos estos niños y niñas.” Kurtey

TRAIGÁMOSLAS.

Plazas de reubicación prometidas por países de la UE

   

66.400
plazas prometidas (sep. 2017)
9.157
plazas cubiertas (feb. 2017)
13%
promesas cumplidas

La historia de Farhad

Farhad es un as de la tecnología de 20 años que quiere estudiar esa materia en Suiza, donde tiene familia.

Pero lleva 11 meses atrapado en el campo de Ritsona, en el norte de Grecia, tras huir de la guerra en Siria con su madre y dos hermanas.

Farhad tuvo que decir adiós a su vida en Alepo, un lugar ya “acabado”, según dice, por las bombas y la llegada del Estado Islámico. Quiere construir una nueva vida, a salvo, en Europa:

“Estoy aquí porque mi país está en guerra. Soy un refugiado de guerra […]. Estoy aquí para tener una nueva vida porque en Siria no hay ningún lugar seguro […].”

Muchas gracias a todas las personas europeas que nos están ayudando.

Farhad

TRAIGAMOS A PERSONAS COMO FARHAD.

¿No puedes venir? ¡Participa online!

Aunque no puedas ir a Bruselas para participar en la concentración, puedes participar en ella mostrando tu apoyo online.

Comparte un selfi con la matrícula

Hazte una foto con la matrícula de tu automóvil y publícala en tus redes sociales con la etiqueta #RefugeePromise.

Etiqueta a tu gobierno o mandatario para mostrarles que quieres dar la bienvenida a las personas refugiadas.

Súmate al evento de Facebook

Súmate al evento en Facebook para mostrar tu solidaridad con las personas que irán en su automóvil y estar al tanto de sus noticias.

Cuantas más personas participemos, mayor podrá ser el impacto en los líderes de la UE.

La historia de Roxani

Roxani estaba embarazada cuando huyó de Siria, y llegó a Grecia en febrero del año pasado. Su bebé nació por cesárea en julio, una experiencia aterradora mientras vivía en condiciones terribles en un campo de refugiados:

“Cuando di a luz recibí el peor trato […] todavía me duelen los puntos […]. Estuve cuatro días en el hospital y luego volví al campo con mi bebé.”

Un año después de su llegada, Roxani sigue esperando la reubicación con la familia de su esposo. Su propia madre, su padre y sus hermanos y hermanas están en Noruega. Pero es una espera llena de ansiedad, porque su bebé no está bien:

“Mi niña no puede comer, vomita todo el tiempo […].”

TRAIGAMOS A PERSONAS COMO ROXANI.

Cuando nos unimos pasan grandes cosas

Si, como a nosotros, te horroriza el trato que está dando Europa a las personas refugiadas, únete y envía a nuestros líderes un mensaje que no podrán ignorar.

Rikko Voorberg, cofundador de Let’s bring them here

Participa en este movimiento de base inscribiéndote para venir a Bruselas o muestra tu apoyo online.

Es hora de que los gobiernos europeos cumplan sus promesas. Vamos a demostrarles que hablamos en serio.