Te presentamos la campaña Hablemos del SÍ y te explicamos cómo sumarte para ayudar a cambiar el mundo conversación a conversación.
¿Cuál es el problema?
Si alguien no da su consentimiento para tener relaciones sexuales, es una violación. Así de simple. Sin embargo, unas leyes anticuadas, unos mitos generalizados, los estereotipos de género y las actitudes preocupantes hacia el consentimiento perpetúan las violaciones.
El número de violaciones en Europa es impresionante. Alrededor de nueve millones de mujeres han sido violadas en la UE. Se cometen muchísimas más violaciones de las que se denuncian. Las mujeres temen que no se las crea y el estigma asociado a esto las disuade de denunciar.
El consentimiento sexual significa que cada persona acepta libremente participar. Guardar silencio o no decir no no equivale a consentir. La ausencia de resistencia o de ropa tampoco definen el consentimiento. Y consentimiento no significa firmar un contrato; no hace falta expresarse con palabras, pero ha de ser explícito y entusiasta.
Queremos cambiar lo que se conoce como “cultura de la violación” que normaliza e incluso justifica la violación en nuestras sociedades.
¿Qué queremos?
Queremos vivir en una sociedad donde no haya violaciones, donde todo el mundo comprenda bien el consentimiento sexual y se respeten y valoren los derechos de todas las personas sobre su propio cuerpo.
¿Cómo?
El consentimiento debe ser directo. Pero a menudo surgen todo tipo de preguntas y emociones difíciles. Una buena forma de entenderlas y resolverlas es hablar de ellas.
Tener conversaciones —cara a cara, en las redes sociales o en cualquier formato posible— podría ayudarnos a todas y todos a reconocer y respetar los sentimientos de las demás personas. Por eso nos unimos con gente de toda Europa para difundir conversaciones sobre el consentimiento.
Queremos desmitificar por qué puede ser difícil, incómodo, embarazoso, vergonzoso; por qué puede repelerte o excitarte, dar miedo y ser confuso hablar y pensar sobre el sexo y el consentimiento.
Al final, en cualquier conversación sobre el consentimiento debemos hablar con claridad: cuando se trata de sexo, el consentimiento lo es todo y no hay zonas grises.
Las conversaciones sobre el consentimiento son importantes para generar más apoyo y cambiar unas leyes sobre la violación que están anticuadas y concienciar sobre los mitos y estereotipos que impiden que se haga justicia a las víctimas de violación.
Participa en la conversación #LetsTalkAboutYes
Para que las cosas cambien, necesitamos que mucha gente participe en la conversación.
¿Cómo es el consentimiento sexual para ti?
- Crea memes y compártelos: Pon a funcionar tu creatividad e inspira a otras personas para que participen en la conversación. Sentimientos, barreras, motivaciones y la necesidad de consentimiento: todo puede formar parte de este tema. Crea un meme simple. Por ejemplo, una imagen con una idea o pregunta sobre qué es para ti el consentimiento sexual para compartir en canales como Instagram. Incluye la etiqueta #LetsTalkAboutYes. Puedes usar diferentes medios: cómics, ilustración, publicidad, diseño gráfico y arte y dibujo digitales.
- Pide a artistas, creativos/as, activistas, personas y organizaciones que participen: ¿Conoces a artistas que podrían estar interesados/as en contribuir a la campaña? ¿Tienes amistades o familiares creativos/as? ¿Conoces a activistas, enseñantes u organizaciones que trabajen sobre este tema? Difunde el mensaje, anima a otras personas a que participen y contribuyan con nuevas creaciones.
- Sigue las conversaciones en línea y participa en ellas – Participa en las redes sociales. Sigue la etiqueta #LetsTalkAboutYes, marca “me gusta” y comparte contenido sobre el consentimiento, y participa en las conversaciones en línea cuando te apetezca.
Imágenes de la cuenta de Instagram @letstalkaboutyes, en la que encontrarás gran variedad de memes sobre el consentimiento.
Implícate más: descarga la guía para el activismo.
La guía ofrece consejos y propone formas en las que se puede contribuir a la campaña, para que más personas, especialmente jóvenes, hablen sobre el consentimiento sexual con desenfado y respeto.
Qué incluye
1. Qué puedes hacer: cómo conseguir la participación de la gente joven2. Guías creativas: cómo crear contenido que propicie conversaciones
3. Esto es consentimiento: cómo hablar (y pensar) sobre el consentimiento
4. Eliminar obstáculos: cómo desmontar mitos y evitar estereotipos
5. El efecto multiplicador: cómo organizar un taller para fomentar conversaciones y expresiones creativas
6. Recursos para supervivientes y activistas: cómo responder y apoyar a las personas supervivientes de agresiones sexuales
7. Lecturas y recursos recomendados: cómo aprender más sobre el consentimiento
Y si haces clic aquí encontrarás una página con más información.