Amnistía Internacional lanza su campaña global anual de envío de cartas con antelación al 10 de diciembre, Día de los Derechos Humanos, en un intento de transformar la vida de personas que han sufrido violaciones de sus derechos.
Este año, Amnistía Internacional hace campaña en favor de la justicia con y para 11 personas de distintos lugares del mundo que han sufrido violaciones de sus derechos humanos a manos de Estados y empresas. La campaña de este año incluye a un hombre negro con discapacidad intelectual que está condenado a muerte por asesinato a pesar de que no hay pruebas que lo vinculen directamente al crimen, una mujer a quien declararon culpable por intentar ayudar a otra a acceder a un aborto seguro en Polonia y dos líderes indígenas que han llevado a juicio al gobierno australiano para proteger a su comunidad de la subida del nivel del mar causada por el cambio climático.
“Mientras el mundo afronta unos niveles de conflicto sin precedentes, una polarización política que fomenta el miedo y la división, una desigualdad creciente y la amenaza existencial de la crisis climática, los derechos humanos de la población mundial corren grave peligro. De Ucrania a Israel y los Territorios Palestinos Ocupados, de Etiopía a Irán, de Myanmar a Polonia, y en otros rincones del mundo, la gente sufre mientras sus derechos humanos son pisoteados”, ha afirmado Agnès Callamard, secretaria general de Amnistía Internacional.
“Los Estados reprimen el activismo y ponen en peligro los derechos humanos en todo el mundo. Quienes se atreven a alzar la voz se enfrentan a penas de prisión, mientras las mujeres tienen dificultades para acceder a asistencia médica y los gobiernos no toman medidas suficientes para prevenir los daños derivados del cambio climático. Por eso la campaña global Escribe por los Derechos de Amnistía Internacional es más importante que nunca. Es el modo de poner el poder en manos de gente corriente, llevando a cabo acciones extraordinarias para corregir estas injusticias.”
La campaña global Escribe por los Derechos de Amnistía Internacional es más importante que nunca. Es el modo de poner el poder en manos de gente corriente, llevando a cabo acciones extraordinarias para corregir estas injusticias.
Agnès Callamard, secretaria general de Amnistía Internacional
Dedicar un poco de tiempo a emprender acciones —envío de cartas, correos electrónicos y tuits y firma de peticiones— realmente supone una gran diferencia para las personas a quienes Amnistía Internacional apoya a través de esta campaña. Desde que comenzó Escribe por los Derechos en 2001, millones de personas han cambiado la vida de otras que habían sido despojadas de sus derechos humanos. Se han llevado a cabo más de 50 millones de acciones, y más de 100 de las personas incluidas en nuestra campaña han visto cambios positivos en su situación.
Este año protagonizan la campaña estas 11 personas:
- Thulani Maseko, asesinado a tiros en su propia casa por hablar sobre la legislación represiva y la violencia estatal excesiva en Esuatini. Nadie ha rendido cuentas por su asesinato.
- Thapelo Mohapi, líder del movimiento de base Abahlali baseMjondolo (AbM), vive escondido porque ha recibido amenazas de muerte simplemente por defender un futuro mejor para la gente de Sudáfrica.
- Pedro Henrique, activista brasileño, fue asesinado a tiros cuando tenía 31 años. Cuatro años después, los agentes de policía presuntamente responsables del homicidio siguen en activo y el juicio todavía no ha comenzado. La madre de Pedro, Ana Maria, lucha valientemente para que se haga justicia por la muerte de su hijo.
- Rocky Myers, un hombre negro con discapacidad intelectual, está condenado a muerte por asesinato en Alabama (Estados Unidos) a pesar de que no hay pruebas que lo vinculen directamente con el lugar del crimen y de los graves defectos de su causa. La autoridad judicial impuso una condena a muerte en contra de la recomendación del jurado, práctica que ya ha sido declarada ilegal en Alabama.
- Los líderes indígenas Uncle Pabai y Uncle Paul han llevado a juicio al gobierno australiano para proteger su tierra natal, su cultura y a su comunidad del aumento del nivel del mar causado por el cambio climático.
- Meta permitió que el odio contra la población rohinyá prosperara en la plataforma de Facebook y con ello avivó la violencia de las fuerzas armadas de Myanmar contra personas de la etnia rohinyá. Sawyeddollah, refugiado en Cox’s Bazaar (Bangladesh), quiere ser abogado y reclama una reparación de Meta para todas las personas a su alrededor que han sufrido violaciones atroces de derechos humanos.
- Justyna Wydrzyńska fue declarada culpable en Polonia por intentar ayudar a una mujer atrapada en una relación de malos tratos a acceder a un aborto sin riesgos.
- Rita Karasartova se encuentra actualmente en arresto domiciliario por manifestarse de forma pacífica en favor de la protección de una represa de agua dulce en Kirguistán, mientras el gobierno sigue atacando los derechos humanos.
- Ahmed Mansoor es un buen padre y esposo, y también poeta, bloguero y defensor de los derechos humanos. Ahora está encarcelado en régimen de aislamiento en Emiratos Árabes Unidos por denunciar las violaciones de derechos humanos que se cometen en el país.
- La activista tunecina Chaima Issa es hija de un ex preso político y ha criticado la situación política en su país. Tiene prohibido viajar al extranjero y, si va a juicio, podría pasar varios años en prisión y enfrentarse a una condena a muerte.
“Todas las personas incluidas en nuestra campaña Escribe por los Derechos han sufrido alguna injusticia, muchas de ellas por defender aquello en lo que creen. Han corrido riesgos enormes, han ido a la cárcel y, en algunos casos, han sido asesinadas. No permitiremos que sus historias pasen inadvertidas. Pedimos a gente de todo el mundo que nos ayude a lograr el cambio”, ha manifestado Agnès Callamard.
Con motivo de Escribe por los Derechos 2023 se han organizado múltiples eventos en todas las regiones del mundo, como una media maratón en Zimbabue, una vigilia a las puertas de la Embajada de Polonia en Reino Unido y actos públicos de envío de cartas en Sudáfrica, Mongolia, República Checa, Canadá, Islandia, Taiwán, Alemania, Nigeria y Togo, entre otros países. Durante los eventos de envío de cartas se pueden enviar cartas de dos tipos: dirigidas a la persona que tiene la autoridad para hacer que cambien las cosas, y dirigidas a las personas por quienes trabaja Amnistía, para que sepan que hay gente apoyándolas.
La campaña Escribe por los Derechos de Amnistía Internacional sigue cosechando un gran éxito en todo el mundo. La campaña tiene efectos positivos cada año ya que contribuye a la liberación de activistas, a garantizar que se hace justicia con quienes han sufrido violaciones de sus derechos y a la protección de la gente, y todo esto demuestra que las palabras realmente pueden cambiar las cosas.
Este mismo año, Joanah Mamombe y Cecillia Chimbiri han sido absueltas de uno de los cargos en su contra tras ser detenidas en 2020 por encabezar una protesta contra el gobierno. Es un cambio fundamental para ambas. Como parte de la campaña Escribe por los Derechos 2022 de Amnistía, nuestra base de simpatizantes emprendió varias acciones y Amnistía Internacional Zimbabue les brindó su apoyo a lo largo del proceso judicial.
Muchas gracias a nuestras amistades en Amnistía Internacional por haber escrito todas estas cartas. Ahora estamos iniciando el camino de la recuperación.
Joanah Mamombe, activista
Al leer las cartas de apoyo, Joanah comentó: “Muchas gracias a nuestras amistades en Amnistía Internacional por haber escrito todas estas cartas. Ahora estamos iniciando el camino de la recuperación.” La campaña Escribe por los Derechos de Amnistía Internacional realmente transforma la vida de personas cuyos derechos han sido vulnerados.