Según denuncias recibidas por Amnistía Internacional, el gobierno venezolano aún no ha firmado la orden que se necesita urgentemente para obtener medicamentos antirretrovirales vitales en Venezuela, poniendo las vidas de aproximadamente 77,000 personas viviendo con VIH en el país en riesgo. Las limitadas reservas de antirretrovirales se terminarán en marzo, según la sociedad civil local.