El 16 de abril, las autoridades huzíes de facto liberaron a cuatro periodistas yemeníes que habían sido condenados a muerte, como parte de un canje de prisioneros con el gobierno de Yemen internacionalmente reconocido. Akram al Walidi, Abdelkhaleq Amran, Hareth Hamid y Tawfiq al Mansouri fueron arrestados en junio de 2015 en Saná, capital de Yemen, y condenados a muerte en abril de 2020 por el Tribunal Penal Especializado de Saná tras un juicio manifiestamente injusto.