Tus derechos peligran. 2015 fue testigo de un asalto generalizado contra las libertades básicas de los seres humanos. Muchos gobiernos infringieron abiertamente el derecho internacional y socavaron intencionadamente las instituciones destinadas a proteger los derechos de las personas.
La protección internacional de los derechos humanos corre peligro de desmoronarse, ya que las draconianas y represivas campañas nacionales de seguridad planteadas a corto plazo y que obedecen a intereses particulares han tenido como resultado un asalto total contra los derechos y libertades fundamentales. Así lo ha advertido Amnistía Internacional en la presentación de su evaluación anual de la situación de los derechos humanos en el mundo.
“Tus derechos peligran: son tratados con absoluto desprecio por muchos gobiernos del mundo”, ha afirmado Salil Shetty, secretario general de Amnistía Internacional.
“Millones de personas sufren terriblemente a manos de Estados y grupos armados mientras los gobiernos califican sin ningún pudor la protección de los derechos humanos como una amenaza para la seguridad, el orden público o los ‘valores’ nacionales.”
Tus derechos peligran; son tratados con absoluto desprecio por muchos gobiernos del mundo.
Salil Shetty, secretario general de Amnistía Internacional
EL AÑO EN IMÁGENES
Los derechos humanos, amenazados globalmente
Amnistía Internacional advierte de una tendencia insidiosa y progresiva al debilitamiento de los derechos humanos, fruto de la acción deliberada de gobiernos que atacan, abandonan o no aportan fondos suficientes a las instituciones creadas para ayudarnos a proteger nuestros derechos.
No sólo peligran nuestros derechos, sino también las leyes y el sistema que los protegen. Más de 70 años de duro esfuerzo y avances en materia de derechos humanos están en la cuerda floja.
Salil Shetty
“No sólo peligran nuestros derechos, sino también las leyes y el sistema que los protegen. Más de 70 años de duro esfuerzo y avances en materia de derechos humanos están en la cuerda floja”, ha dicho Salil Shetty.
Gobiernos que intentan eludir el escrutinio de sus historiales nacionales están socavando los órganos de derechos humanos de las Naciones Unidas, la Corte Penal Internacional y mecanismos regionales como el Consejo de Europa y el sistema interamericano de derechos humanos.
Amnistía Internacional pide a los gobiernos apoyo político y financiación plena de los sistemas existentes para hacer respetar el derecho internacional y proteger los derechos de las personas.
Descarga el Informe 2015/16 de Amnistía Internacional
Ataques contra los derechos humanos en cifras
Los derechos humanos, amenazados nacionalmente
Amnistía Internacional ha documentado el número de gobiernos que en 2015 han infringido descaradamente el derecho internacional en su ámbito nacional: más de 122 Estados ejercieron la tortura u otros malos tratos y 30 o más obligaron ilegalmente a personas refugiadas a retornar a países donde corrían peligro. En al menos 19 países, el gobierno o grupos armados cometieron crímenes u otras violaciones de las “leyes de la guerra”.
La organización advierte igualmente sobre una tendencia preocupante en los gobiernos, que cada vez adoptan más medidas y emprenden más ataques contra activistas, profesionales de la abogacía y otras personas que trabajan en la defensa de los derechos humanos.
“En lugar de reconocer el papel fundamental de estas personas en la sociedad, muchos gobiernos se han propuesto acallar por completo las críticas en su país. Se han saltado sus propias leyes en sus campañas de represión contra la ciudadanía”, ha afirmado Salil Shetty.
Amnistía Internacional afirma que esto se debe en parte a la reacción de muchos gobiernos ante las nuevas amenazas para la seguridad en 2015.
“La desacertada reacción de muchos gobiernos contra las amenazas para la seguridad nacional ha consistido en reprimir a la sociedad civil, el derecho a la intimidad y el derecho a la libertad de expresión, así como en descarados intentos de hacer de los derechos humanos un insulto, al presentarlos como contrarios a la seguridad nacional, el orden público y los ‘valores nacionales’. Han llegado incluso a violar su propia legislación de esta manera”, ha afirmado Salil Shetty.
Ejemplos de países
Rusia
Su uso represivo de una legislación nacional imprecisa en materia de seguridad y contra el extremismo, así como sus intentos concertados de silenciar a la sociedad civil; su vergonzosa negativa a reconocer los homicidios de civiles en Siria, y sus insensibles iniciativas para bloquear la acción del Consejo de Seguridad sobre Siria.
Tailandia
La detención de disidentes pacíficos por actividades como representar obras teatrales, publicar comentarios en Facebook y mostrar grafitis, y el caso omiso de las autoridades militares a los llamamientos internacionales para que no amplíen sus propias atribuciones, que les permiten imponer excesivas restricciones a los derechos y silenciar la disidencia en nombre de la “seguridad”.
Burundi
Los homicidios sistemáticos y otras tácticas violentas generalizadas de las fuerzas de seguridad, y sus intentos de reprimir a la comunidad que defiende los derechos humanos en el país.
Israel
El mantenimiento del bloqueo militar de Gaza y, por tanto, el castigo colectivo impuesto a sus 1,8 millones de habitantes, así como no haber cumplido —como tampoco ha hecho Palestina— la petición de la ONU de llevar a cabo investigaciones creíbles sobre los crímenes de guerra cometidos durante la guerra de Gaza en 2014.
Venezuela
La continua falta de justicia en casos de graves violaciones de derechos humanos y los constantes ataques contra quienes defienden los derechos humanos, y su constante denuncia de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, después de haberse retirado de la jurisdicción de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, privando así de acceso a la justicia a las víctimas de estos abusos.
Tus derechos peligran: algunas cifras
La ONU precisa revitalización urgente
Las Naciones Unidas y sus oficinas de protección de derechos humanos y personas refugiadas se resintieron gravemente por culpa de la hostilidad y el abandono de recalcitrantes gobiernos en 2015.
“La ONU fue creada para ‘preservar a las generaciones venideras del flagelo de la guerra’ y para ‘reafirmar la fe en los derechos fundamentales del hombre’, pero es más vulnerable que nunca a los enormes desafíos”, ha manifestado Salil Shetty.
Muchos gobiernos han impedido a propósito que actúe la ONU para evitar atrocidades masivas o para obligar a rendir cuentas a los autores de esas atrocidades, y han desoído o despreciado sus recomendaciones destinadas a mejorar la situación nacional de los derechos humanos.
El conflicto sirio es un terrible ejemplo de las catastróficas consecuencias del fracaso sistémico de la ONU en el cumplimiento de su función fundamental para hacer respetar los derechos y el derecho internacional y para garantizar la rendición de cuentas.
El secretario o secretaria general de la ONU entrante, que será elegido este mismo año y tomará posesión de su cargo en enero de 2017, heredará una organización que ha logrado mucho pero que necesita revitalizarse con urgencia, según Amnistía Internacional. La organización pide a los Estados miembros de la ONU y a su Consejo de Seguridad que muestren ideas nuevas y audaces para avanzar en las reformas, empezando por el proceso de elección del secretario o secretaria general.
“Los Estados miembros de la ONU tienen este año una oportunidad histórica para revitalizar la organización apoyando una candidatura fuerte al puesto de secretario o secretaria general, con el compromiso, entereza personal y visión necesarios para contrarrestar toda iniciativa de los Estados empeñados en menoscabar los derechos humanos en el ámbito nacional e internacional”, ha dicho Salil Shetty.
Para ello, afirma Amnistía Internacional, el proceso de elección debe ser imparcial y transparente, y debe garantizar que se conoce y comprende la concepción que los candidatos y candidatas tienen de los principales desafíos a los que se enfrenta la ONU en materia de derechos humanos.
La situación de los derechos humanos en el mundo en cifras
ROSTROS DE 2015
Señales de esperanza
Las señales de esperanza que se vieron a lo largo de 2015 fueron resultado de un continuo trabajo de incidencia, organización, oposición y activismo por parte de la sociedad civil, los movimientos sociales y quienes defienden los derechos humanos.
Ninguno de estos logros fue fruto de la magnanimidad de los Estados. Los gobiernos deben permitir que activistas y defensores y defensoras de los derechos humanos dispongan de la libertad y el espacio que necesitan para llevar a cabo su importantísima labor.
Salil Shetty
Basten como muestra tres ejemplos del pasado año: la presencia de elementos de derechos humanos y rendición de cuentas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU; la acción que, en mayo, impidió los desalojos forzosos en el marco del proyecto de carretera regional de acceso al puerto de Mombasa, en Kenia; y la liberación del preso de conciencia papú Filep Karma gracias a los 65.000 mensajes de apoyo escritos por simpatizantes de todo el mundo.
Ninguno de estos logros fue fruto de la magnanimidad de los Estados. Los gobiernos deben permitir que activistas y defensores y defensoras de los derechos humanos dispongan de la libertad y el espacio que necesitan para llevar a cabo su importantísima labor. Por lo tanto, Amnistía Internacional insta a los Estados a asegurar que se aplica la resolución adoptada en noviembre por la Asamblea General para proteger los derechos de los defensores y defensoras de los derechos humanos, lo que incluye denunciar y desacreditar a los Estados que no lo hagan.