Binyam Mohamed, liberado de Guantánamo

Binyam Mohamed salió libre del centro de detención de Guantánamo ayer lunes, 23 de enero, y se le permitió regresar a Reino Unido, su país de residencia. Su familia y representantes letrados, junto con activistas de derechos humanos, entre ellos la membresía de Amnistía Internacional, han trabajado intensamente por su liberación.

Binyam Mohamed, ciudadano etíope, ha denunciado que fue sometido a tortura y malos tratos durante los más de seis años que ha estado detenido. Según informes, su salud se ha deteriorado drásticamente durante ese tiempo.

El lunes 23, en una declaración transmitida a través de sus abogados, Binyam Mohamed expresó su gratitud a las personas que habían trabajado por su liberación.

“Quiero dar las gracias a todas las personas de Gran Bretaña que me escribieron a Guantánamo para levantarme el ánimo, así como a los profesionales de los medios de comunicación que quisieron asegurarse de que el mundo entero supiera lo que estaba pasando”, dijo.

“Soy consciente de que hoy no estaría en casa en Gran Bretaña si no fuera por el apoyo de todo el mundo. De hecho, es posible que ni siquiera estuviera vivo.”

Binyam Mohamed fue detenido en Pakistán en abril de 2002 y se lo ha mantenido recluido durante más de seis años, primero en centros secretos de detención de Pakistán, Marruecos y Afganistán y luego –desde septiembre de 2004– en Guantánamo. Nunca se lo sometió a juicio.

Ha realizado denuncias creíbles de torturas y malos tratos reiterados a lo largo del periodo de detención. Y recientemente ha surgido información creíble que indica que los servicios de inteligencia y seguridad británicos pueden haber sido cómplices de la tortura y los malos tratos.

“La liberación de Binyam Mohamed llena de tranquilidad a su familia y amistades –manifestó Nicola Duckworth, directora del Programa Regional de Amnistía Internacional para Europa y Asia Central–. Aunque siguen sin responderse una serie de preguntas enormemente preocupantes sobre el modo en que Binyam Mohamed fue tratado durante los años que estuvo dentenido.”

Amnistía Internacional cree que hace tiempo que los detalles sobre el caso de Binyam Mohamed y otros parecidos tenían que haber salido a la luz, y que también hace tiempo que debía haberse procesado a las personas responsables de graves violaciones de los derechos humanos.

Los gobiernos tanto de Reino Unido como de Estados Unidos deben abrir sin demora investigaciones independientes del programa de entregas extraordinarias y detención secreta.

En el caso de Estados Unidos, Amnistía Internacional ha pedido que se cree una comisión de investigación totalmente independiente que examine todos los aspectos de las prácticas de detención secreta e interrogatorios utilizadas por el país en el contexto de la “guerra contra el terror”.

En el caso de Reino Unido, la investigación debe examinar las denuncias de la participación británica en el programa, entre ellas las denuncias sobre la complicidad de Reino Unido en la tortura y los malos tratos infligidos a Binyam Mohamed.
Sólo una investigación exhaustiva e independiente puede llegar al fondo de esas cuestiones.

En la declaración emitida tras su liberación, Binyam Mohamed instó a que se siguiera haciendo campaña en favor de los hombres que aún están recluidos en Guantánamo.

“Mi propia desesperación alcanzó cotas máximas cuando pensé que todo el mundo me había abandonado. Tengo el deber de asegurarme de que ninguno más cae en el olvido”, afirmó.

Amnistía Internacional ha pedido al gobierno estadounidense que garantice la inmediata puesta en libertad o un juicio con las debidas garantías procesales de todas las personas que aún están recluidas en Guantánamo. Asimismo, ha pedido a otros países, incluidos países europeos, que proporcionen protección humanitaria a los detenidos de Guantánamo que no pueden ser repatriados en condiciones de seguridad.