Las autoridades reprimieron el derecho a la libertad de expresión y de reunión pacífica, utilizando medidas tales como la intimidación de quienes defendían los derechos humanos y otros grupos de población, y el bloqueo del acceso a Internet en la región de Amhara. Se detuvo arbitrariamente y se recluyó a activistas, defensores y defensoras de los derechos humanos, periodistas y artistas, y algunas personas huyeron del país durante la imposición de leyes de estado de excepción que se utilizaron para actuar contra la disidencia pacífica. Se documentaron informes de crímenes de derecho internacional, especialmente crímenes de guerra, cometidos en el conflicto armado de la región de Amhara; la Fuerzas de Defensa Nacional de Etiopía llevaron a cabo homicidios ilícitos, incluidas ejecuciones extrajudiciales. El primer ministro y su gobierno siguieron negando estos actos y no se tomaron medidas dignas de mención para impartir justicia. Aumentaron los casos de violencia sexual contra las mujeres y las niñas, y continuaron los incidentes de violencia sexual relacionada con los conflictos.
Leer másRetiene la pena de muerte en la legislación
Herramientas de campaña que se pueden emplear para intervenir con carácter de urgencia y defender los derechos humanos de alguien.
Informes, documentos informativos, declaraciones, contribuciones escritas para OIG y otros recursos de los equipos de investigación de Amnistía.