Ante la decisión del Tribunal Municipal de Moscú de suspender la expulsión a Uzbekistán del periodista abiertamente gay Khudoberdi Nurmatov (más conocido por su seudónimo de periodista Ali Feruz) pero mantenerlo detenido mientras el Tribunal Europeo de Derechos Humanos revisa su caso, Denis Krivosheev, director adjunto de Amnistía Internacional para Europa y Asia Central, ha declarado:
“La suspensión de la expulsión de Ali Feruz a Uzbekistán —donde corre un riesgo real de persecución y tortura, y donde la homosexualidad es delito— es una medida positiva. Sin embargo, es una vergüenza que continúe detenido a pesar de sus denuncias de que ha sido objeto de palizas. Ali Feruz no ha cometido absolutamente ningún delito y podrían transcurrir meses, incluso años, hasta que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos tome una decisión.”
La suspensión de la expulsión de Ali Feruz a Uzbekistán —donde corre un riesgo real de persecución y tortura, y donde la homosexualidad es delito— es una medida positiva. Sin embargo, es una vergüenza que continúe detenido a pesar de sus denuncias de que ha sido objeto de palizas.
Denis Krivosheev, director adjunto de Amnistía Internacional para Europa y Asia Central
“Ali Feruz denunció que los funcionarios de seguridad lo habían golpeado durante el traslado al centro de detención y durante la vista judicial de hoy mostró hematomas. El juez decidió ignorar estas impactantes denuncias.”
“Las autoridades rusas deben poner en libertad de inmediato a Ali Feruz, y garantizar su integridad física y la protección efectiva frente a la devolución a Uzbekistán.”
Información complementaria
El martes 8 de agosto, el Tribunal Municipal de Moscú revocó la sentencia que ordenaba la devolución de Ali Feruz desde Rusia a Uzbekistán. Sin embargo, resolvió que permaneciera detenido mientras el Tribunal Europeo de Derechos Humanos revisaba su caso.
La detención por motivos de control de la migración siempre debe utilizarse únicamente como último recurso, durante el mínimo tiempo posible y sólo cuando sea necesaria y proporcionada al objetivo de impedir la fuga, para verificar la identidad o asegurar el cumplimiento de una orden de expulsión.
Ali Feruz, activista de derechos humanos y periodista del medio independiente Novaya Gazeta, fue detenido el 1 de agosto y ha denunciado que fue golpeado en su traslado desde el tribunal.
Más información: Russia: Decision to deport journalist to Uzbekistan puts him at risk of persecution and torture