El informe del gobierno chino ante el Consejo de Derechos Humanos “encubre abusos”

Amnistía Internacional ha declarado que el informe del gobierno chino para el Examen Periódico Universal (EPU) de la ONU encubre abusos graves contra los derechos humanos que se están cometiendo en todo el país. La organización ha presentado su propio informe en el que llama la atención sobre varias cuestiones que debería exponer el Consejo de Derechos Humanos cuando realice el EPU de China, el 9 de febrero.

China se ha involucrado de manera positiva con el Examen Periódico Universal de la ONU, por ejemplo presentando su informe puntualmente. Asimismo, ha realizado avances en ciertas áreas de derechos humanos, como los relativos a su sistema legal, los programas de educación en derechos humanos y la aprobación de la Ley de Contratación, entre otros.

Sin embargo, el informe del gobierno chino omite las referencias a la crisis en curso en el Tíbet, la severa represión de los uigures en la Región Autónoma Uigur del Sin-kiang y la persecución a que somete a practicantes de diversas religiones, como los miembros de Falun Gong.

Según el diario oficial de Lhasa, Lhasa Evening News, el 18 de enero se lanzó en esa ciudad, capital del Tíbet, una Campaña de Control Unificada de Mano Dura que incluye “registros de investigación ” en zonas residenciales, habitaciones alquiladas, hoteles, casas de huéspedes, cibercafés y bares. El 24 de enero, la policía había detenido a 81 sospechosos, dos de ellos por tener “opiniones reaccionarias y canciones reaccionarias en sus teléfonos móviles”.

Seis meses después de la clausura de los Juegos Olímpicos de Pekín, el EPU ofrece una oportunidad excepcional para que la comunidad internacional mantenga relaciones de trabajo sistemáticas con China en relación con todo el espectro de los motivos de preocupación en materia de derechos humanos.

“Siempre es bueno ver que China mantiene relaciones de trabajo con el mundo en relación con los derechos humanos —ha declarado Roseann Rife, directora adjunta del Programa Regional para Asia y Oceanía de Amnistía Internacional—. La cuestión ahora es cómo repercutirá esa relación en la vida de los ciudadanos chinos y, sobre todo, en la de quienes sufren persecución por ejercer pacíficamente sus derechos.”

“El informe nacional de China omite algunas de las cuestiones más apremiantes en el país —ha afirmado Roseann Rife—. Ignorar violaciones graves de derechos humanos que se cometen en el país va en detrimento de los objetivos y del espíritu del proceso de los exámenes periódicos universales de la ONU.”

Según Amnistía Internacional, el informe oficial tampoco menciona los sistemas de detención administrativa de China, en los que varios cientos de miles de personas podrían estar privadas de libertad sin juicio ni acceso a un abogado, ni la necesidad de reformar el sistema de registro de residencia, que institucionaliza una ciudadanía de segunda clase para los cientos de millones de trabajadores rurales que viven en las ciudades.