Tres personas presas (dos hombres y una mujer) corren riesgo inminente de ser sometidas a ceguera aprobada judicialmente tras el envío de sus causas a la Sección 3 de la Oficina de Aplicación de Condenas en Teherán para que aplique sus condenas de ceguera en virtud del principio de qesas (castigo equivalente al delito cometido).