En respuesta al acoso y el interrogatorio de Sami Ben Gharbia, fundador y director del sitio web tunecino de noticias independiente Nawaat, que fue interrogado durante seis horas esta semana en relación con un artículo en el que se daban a conocer detalles de un polémico proyecto de ley del gobierno, Najia Bounaim, directora de Campañas de Amnistía Internacional para el Norte de África, ha dicho:
“Someter a un periodista independiente a un prolongado interrogatorio y acoso en relación con su trabajo es un flagrante ataque a la libertad de prensa. Este incidente es una preocupante señal de que las autoridades tunecinas están dispuestas a restringir la libertad de expresión, e indica que los periodistas que las critican podrían ser castigados por llevar a cabo su legítima labor.
Este incidente es una preocupante señal de que las autoridades tunecinas están dispuestas a restringir la libertad de expresión.
Najia Bounaim, directora de Campañas de Amnistía Internacional para el Norte de África
“En vez de acosar a los periodistas para que revelen sus fuentes y de someterlos a largos interrogatorios, el gobierno tunecino debe garantizar que todos los periodistas del país pueden desempeñar su labor sin sufrir intimidaciones, acosos ni amenazas de detención.”
El periodista fue citado para ser interrogado el 3 de mayo en relación con un artículo publicado por Nawaat el 21 de abril en el que se daban a conocer detalles de un plan presidencial para aprobar una versión modificada de la polémica ley tunecina de reconciliación económica. La ley propuesta por el presidente ha suscitado polémica entre políticos, activistas anticorrupción y la sociedad civil en general por ofrecer inmunidad judicial a funcionarios y empresarios acusados de corrupción y malversación durante el gobierno de Ben Alí si devuelven lo sustraído.