Una escapatoria menos al delito de violación: tímido avance para erradicar esta lacra en el Norte de África

Amina Filali sólo tenía 16 años cuando, presa de la desesperación, decidió quitarse la vida.

Varios meses antes habían obligado a esta adolescente marroquí a casarse con un hombre a quien ella acusó de haberla violado.

En marzo de 2012, Amina perdió toda esperanza. Tomó veneno para ratas en su ciudad natal de Larache y murió poco después.

Hasta la semana pasada, los hombres acusados de violación en Marruecos podían eludir el procesamiento casándose con la víctima, si ésta tuviese menos de 18 años.

Casi dos años después de la muerte de Amina, se ha abolido por fin esta cláusula de escape tan criticada del Código Penal marroquí.

La decisión llega demasiado tarde para Amina, pero la enmienda al artículo 475 es un paso importante para las mujeres y las niñas de Marruecos y una victoria para las activistas de los derechos de las mujeres que, tras la muerte de la muchacha, se movilizaron enormemente para lograr que se modificase la legislación.

Por desgracia, para otras muchas mujeres y niñas del Magreb, estas leyes siguen suponiendo una terrible amenaza.

Este artículo se publicó inicialmente en el International Business Times. Para leerlo íntegramente, hagan clic aquí.