Amnistía Internacional ha sabido que, al parecer, Sheikh ‘Ali bin ‘Ali al-Ghanim fue torturado durante sus cinco primeros meses bajo custodia. Parece ser que lo golpearon por todo el cuerpo, le impidieron dormir y lo colgaron de techo sujeto por las piernas. Amnistía Internacional había pedido a las autoridades saudíes garantías de que Sheikh ‘Ali bin ‘Ali al-Ghanim no iba a sufrir torturas.