Las Fuerzas de Defensa Nacional de Etiopía (ENDF) ejecutaron extrajudicialmente a civiles en Bahir Dar —la capital del estado regional de Amhara— y en algunos casos negaron a sus familiares el derecho a enterrar a sus seres queridos, ha afirmado hoy Amnistía Internacional en un nuevo documento informativo.
La publicación, titulada “We Thought They Would Fight With Those They Came To Fight, – Extra-judicial executions in Bahir Dar by ENDF soldiers”, documenta cómo soldados de las Fuerzas de Defensa Nacional de Etiopía ejecutaron extrajudicialmente el 8 de agosto de 2023 a seis civiles en los barrios de Abune Hara y Lideta, situados en el kebele (municipalidad) 14 de la capital.
Dos meses después, los días 10 y 11 de octubre, miembros de las Fuerzas de Defensa Nacional de Etiopía ejecutaron extrajudicialmente a otros seis hombres, de los cuales al menos cinco eran civiles, en el barrio de Seba Tamit de la ciudad.
El gobierno de Etiopía debe abrir con urgencia investigaciones independientes y eficaces sobre los abusos contra los derechos humanos cometidos en el contexto del actual conflicto armado en Bahir Dar y en toda la región de Amhara.
Tigere Chagutah, director regional de Amnistía Internacional para África Oriental y Austral
La repercusión sobre los derechos humanos que ha tenido el conflicto en la región de Amhara ha tardado en hacerse patente debido al cierre de Internet, a los cortes parciales de las comunicaciones y al estado de excepción generalizado que afecta a la libertad de expresión y de los medios de comunicación, así como al temor a represalias.
“El gobierno de Etiopía debe abrir con urgencia investigaciones independientes y eficaces sobre los abusos contra los derechos humanos cometidos en el contexto del actual conflicto armado en Bahir Dar y en toda la región de Amhara. Cuando haya pruebas suficientes, los presuntos autores de las violaciones de derechos humanos deben ser procesados con arreglo a las normas internacionales sobre juicios justos y sin recurrir a la pena de muerte”, declaró Tigere Chagutah, director regional de Amnistía Internacional para África Oriental y Austral.
Las violaciones graves del derecho internacional humanitario, como se documenta en este informe, pueden constituir crímenes de guerra, tipificados como crimen de derecho internacional. Las ejecuciones extrajudiciales son también violaciones del derecho a la vida protegido por el derecho internacional de los derechos humanos.
En Etiopía, la impunidad sistémica sigue envalentonando a los autores de crímenes, ante la carencia de una justicia creíble y de la obligación de rendir cuentas por abusos graves que constituyen crímenes de derecho internacional. Es hora de poner fin a esta falta de rendición de cuentas ante la justicia que está extendida en todo el país.
Tigere Chagutah
“En Etiopía, la impunidad sistémica sigue envalentonando a los autores de crímenes, ante la carencia de una justicia creíble y de la obligación de rendir cuentas por abusos graves que constituyen crímenes de derecho internacional. Es hora de poner fin a esta falta de rendición de cuentas ante la justicia que está extendida en todo el país.
LAS EJECUCIONES EXTRAJUDICIALES DE AGOSTO EN ABUNE HARA Y LIDETA
Según testigos presenciales y familiares, las víctimas murieron por heridas de bala causadas por disparos a corta distancia.
Una de las personas ejecutadas extrajudicialmente fue una mujer, Yitateku Ayalew, que murió en su casa, cerca de Lideta, abatida por los disparos de un soldado de las Fuerzas de Defensa Nacional de Etiopía según varios testigos, entre ellos Biniyam*, un familiar de 17 años. Biniyam declaró que, en la mañana del 8 de agosto, Yitateku estaba preparando injera —un pan plano muy fino, base de la comida etíope— cuando empezaron a oír disparos.
“Sobre las 8 de la mañana, empezamos a oír disparos provenientes de donde está la inmobiliaria Mulugeta. La gente del recinto le dijo a Yitateku que dejara de cocinar allí y que volviera a casa, pero ella dijo: ‘Mi hijo no ha desayunado y tengo que terminar’. No quiso escuchar. Sobre las 9.15 de la mañana, un grupo de soldados se acercó corriendo, me parece que estaban persiguiendo a alguien en la calle. Entonces empezaron a disparar hacia el recinto y alcanzaron a Yitateku y a otra persona. Dispararon a través de un agujero de la valla y se fueron”.
Otras víctimas fueron Aynew Defresh, comerciante de 55 años, y sus dos hijos, Kassahun y Abraham. Los tres hombres murieron a tiros en la calle cuando regresaban a casa desde la iglesia. Un familiar contó que, cuando llamaron al teléfono de Aynew, contestó una persona que parecía ser de las Fuerzas de Defensa Nacional de Etiopía y dijo: “ha sido un pequeño accidente”. Finalmente, los familiares se llevaron los tres cadáveres a casa.
LAS EJECUCIONES EXTRAJUDICIALES DE OCTUBRE EN SEBA TAMIT
El 10 de octubre, dos meses después de los primeros enfrentamientos en Bahir Dar, estallaron de nuevo los combates en otras partes de la ciudad, principalmente en la zona de Seba Tamit.
Amnistía Internacional ha verificado las ejecuciones extrajudiciales de seis personas los días 10 y 11 de octubre a manos de soldados de las Fuerzas de Defensa Nacional de Etiopía. Entre ellas había un paciente que fue ejecutado extrajudicialmente en un centro de salud donde los soldados también golpearon y amenazaron a punta de pistola a personal sanitario
En la misma zona, soldados de las Fuerzas de Defensa Nacional de Etiopía ejecutaron extrajudicialmente a tres hermanos y a uno de sus vecinos en la mañana del 11 de octubre, tras entrar a la vivienda de Tadesse Mekonen, de 69 años de edad. Tres personas diferentes entrevistadas por Amnistía Internacional afirmaron que los soldados asesinaron a los tres hijos de Tadesse y a una persona que alquilaba una habitación dentro de su propiedad.
Kassa*, pariente de Tadesse que se encontraba con la familia en el momento del ataque, relató que abrieron la puerta a los soldados y éstos escoltaron a todos los integrantes varones de la familia fuera del recinto. Los soldados de las Fuerzas de Defensa Nacional de Etiopía empezaron a golpear a los hombres hasta que uno de ellos dijo: “Que no quede ninguno, dispárenles a todos”.
Según Kassa, en un primer momento los soldados prohibieron a la familia recuperar los cuerpos, así que tuvieron que esperar hasta que se marcharon. Tres testigos afirmaron que los cadáveres estuvieron en la calle desde las 9 de la mañana a las 4 de la tarde. Kassa contó que la familia tuvo que ocultar los cuerpos y enterrarlos en una iglesia de la que no son feligreses y que está más lejos de donde viven.
Amnistía Internacional preguntó a todas las personas entrevistadas cómo pudieron identificar a los autores como miembros de las Fuerzas de Defensa Nacional de Etiopía. La mayoría de ellas dijeron que estas fuerzas llevaban tres meses actuando en Bahir Dar antes de que estallasen los combates y que habían reconocido el uniforme. Algunas afirmaron que los soldados preguntaban a las víctimas o a sus familias cosas como: “Trae el arma, ¿apoyas a Fano?”.
Más de un año después de que cesaran las hostilidades en Tigré, los soldados de las Fuerzas de Defensa Nacional de Etiopía siguen violando los derechos humanos y el derecho internacional humanitario en un escenario de conflicto armado diferente.
“Las autoridades etíopes deben garantizar que las denuncias de violaciones de crímenes de derecho internacional perpetradas desde finales de 2020 por las Fuerzas de Defensa Nacional de Etiopía y las fuerzas aliadas se investigan y se llevan ante un tribunal de justicia.
“Ha llegado el momento de volver a someter a Etiopía a un escrutinio regional e internacional. Los socios del país —incluidos los miembros del Consejo de Derechos Humanos de la ONU— deben tomar medidas inmediatas para reanudar el escrutinio de la situación de los derechos humanos en Etiopía y establecer un proceso de seguimiento de las conclusiones de la Comisión Internacional de Expertos en Derechos Humanos sobre Etiopía.”
Ha llegado el momento de volver a someter a Etiopía a un escrutinio regional e internacional.
Tigere Chagutah
El 9 de febrero de 2024, Amnistía Internacional comunicó sus conclusiones preliminares al Ministerio de Justicia con copia al Ministerio de Asuntos Exteriores de la República Democrática Federal de Etiopía. En el momento de redactar estas líneas, la organización no había recibido respuesta.
Información complementaria
En agosto de 2023 estalló un conflicto armado no internacional en la región de Amhara entre las Fuerzas de Defensa Nacional de Etiopía y la milicia Fano. Antes aliados y convertidos ahora en enemigos, habían luchado juntos en la región de Tigré al norte de Etiopía. Los enfrentamientos se iniciaron tras el acuerdo de cese de las hostilidades entre el gobierno federal y el Frente Popular de Liberación de Tigré, en noviembre de 2022, y la decisión del gobierno federal de abril de 2023 de integrar las fuerzas regionales especiales en las fuerzas federales. Descontentos por esta decisión, los miembros de las Fuerzas Especiales de la Policía de Amhara se unieron a la milicia Fano.
El 1 de agosto de 2023, las Fuerzas de Defensa Nacional de Etiopía lanzaron una advertencia pública a un grupo al que se dirigieron como “el que perturba la paz del país en el nombre de Fano”. El 2 de agosto de 2023, residentes de algunas zonas de la región de Amhara informaron a los medios de comunicación acerca de enfrentamientos entre las Fuerzas de Defensa Nacional de Etiopía y la milicia Fano.
El 4 de agosto de 2023, el gobierno etíope declaró un estado de excepción nacional de seis meses de duración tras el incremento de la violencia en la región de Amhara, que se amplió a otros cuatro meses el 2 de febrero de 2024.
Consulten los últimos informes de Amnistía Internacional sobre Etiopía, así como nuestros informes anteriores sobre la región de Amhara.
Consulten el documento informativo aquí.
* Los nombres de las personas entrevistadas se han cambiado para proteger su identidad.