El pasado 25 de mayo, las fuerzas armadas huzíes irrumpieron en una reunión pacífica de bahaíes que se celebraba en Saná (Yemen). Un total de 17 personas —entre ellas, 5 mujeres— fueron detenidas y sometidas a desaparición forzada. Posteriormente, ha quedado en libertad una persona, pero las otras 16 continúan bajo custodia huzí y se desconocen su suerte y su paradero. La religión bahaí, minoritaria en Yemen, ha sido constantemente perseguida por las autoridades de facto huzíes, que han violado así el derecho a la libertad de religión y de creencia de sus fieles.