Ilham Tohti, destacado intelectual uighur, ha sido puesto formalmente bajo custodia en China y acusado de “separatismo”. El cargo es punible con penas de prisión de entre 10 años y cadena perpetua o, incluso, con la pena de muerte. Todavía se le sigue negando el acceso a su familia y a su abogado, y corre peligro de ser objeto de torturas y otros malos tratos.