Contabilizando el coste humano del conflicto de Sri Lanka

El 23 de mayo, el gobierno de Sri Lanka anunció un plan para reasentar a la mayor parte de la población civil desplazada por el conflicto antes de que finalice el año. El objetivo inicial del gobierno –reasentar al 80 por ciento de los desplazados– fue revisado a la baja posteriormente y fijado en el 60 por ciento.

El plan, de 180 días de duración, pretendía incluir tanto a personas recientemente desplazadas por los combates librados en el norte del país, como a personas que llevaban desplazadas periodos prolongados.

Algunas familias srilankesas llevan años o decenios viviendo como personas internamente desplazadas y el proceso de reasentarlas no ha concluido. El ministro de Reasentamiento y Servicios de Ayuda en las Catástrofes, Rishad Bathiudeen, afirmó ante el Parlamento srilankés en agosto que el gobierno había reasentado a más de 59.000 familias desplazadas por la guerra en los últimos meses, principalmente familias que ya habían sido víctimas de desplazamientos anteriores en el este del país.

Según datos de la ONU sobre ayuda humanitaria, 266.567 personas desplazadas por el conflicto en el norte del país después del 1 de abril de 2009 permanecían en campos y hospitales a 28 de agosto. En junio esta cifra ascendía a 280.000 personas. Casi 250.000 de ellas se encontraban en el distrito de Vavuniya.

El plan del gobierno para devolver a las personas a sus lugares de origen consta de cuatro fases: en primer lugar se reasentará a las familias procedentes del este de Sri Lanka y Jaffna, seguidas por las de Vavuniya, Mannar y, por último, las de Kilinochchi y Mullaitivu, antiguos baluartes de los Tigres de Liberación de Eelam Tamil. La Oficina del Presidente es el organismo responsable de coordinar este plan.

A finales de agosto, según los informes, 6.490 personas fueron autorizadas a salir de los campos para vivir con familias de acogida o en residencias de ancianos. La mayoría eran ancianos o discapacitados. Entre el 5 y el 28 de agosto, 5.123 personas fueron devueltas a los distritos de Jaffna, Vavuniya, Mannar, Trincomalee, Batticaloa y Ampara.

El 26 de agosto, unos 800 sacerdotes hindúes y católicos fueron liberados de los campos para personas desplazadas de Vavuniya. El 20 de agosto, 130 personas desplazadas en 2006 fueron trasladadas desde el distrito de Batticaloa al distrito de Trincomalee, pero no pudieron regresar a sus hogares porque sus tierras se encuentran dentro de un área que el ejército ha calificado como zona de alta seguridad. En su lugar han sido instaladas en una escuela y en otro edifico público.