En respuesta al inicio de una extensa operación militar israelí en la Cisjordania ocupada contra varias ciudades y pueblos palestinos —entre ellos Yenín, Tulkarem, Nablús y Tubas— y al despliegue de cientos de soldados para cometer ataques con el apoyo de aviones de combate, drones y excavadoras, Erika Guevara Rosas, directora senior global de Investigación, Incidencia, Política y Campañas de Amnistía Internacional, ha declarado:
“El lanzamiento de un extenso ataque militar israelí coordinado contra ciudades y pueblos en toda la Cisjordania ocupada se suma a la escalada de homicidios ilegítimos cometidos por las fuerzas israelíes en los meses precedentes y pone en situación de peligro a más personas palestinas. Desde octubre de 2023, se ha observado un escalofriante aumento en el uso de la fuerza letal por parte de las tropas israelíes y los ataques violentos de los colonos respaldados por el Estado en Cisjordania, incluida la Jerusalén Oriental, que han acabado con la vida de 622 personas palestinas, si no más, entre ellas un mínimo de 142 menores.”
“Las continuadas operaciones militares de esta magnitud conducirán sin duda a una escalada de violencia mortífera, con la consiguiente pérdida de más vidas palestinas. Es probable que estas operaciones den lugar a un aumento de los desplazamientos forzados, la destrucción de infraestructuras esenciales y las medidas de castigo colectivo, que han sido pilares fundamentales del sistema de apartheid de Israel contra la población palestina y de su ocupación ilegal del Territorio Palestino Ocupado.”
Las continuadas operaciones militares de esta magnitud conducirán sin duda a una escalada de violencia mortífera, con la consiguiente pérdida de más vidas palestinas.
Erika Guevara Rosas, directora senior global de Investigación, Incidencia, Política y Campañas
“Ante los alarmantes informes según los cuales las fuerzas israelíes han rodeado hospitales e impedido el acceso a ellos, Amnistía Internacional insta a las autoridades israelíes a que tomen medidas para salvaguardar las instalaciones sanitarias y su personal. Además, deben garantizar que quienes precisan atención médica pueden obtener la asistencia debida. Como potencia ocupante, Israel tiene la clara obligación de proteger a la población palestina y sus hogares, además de las infraestructuras a lo largo y ancho del Territorio Palestino Ocupado.”
Amnistía Internacional documentó previamente que las fuerzas israelíes desencadenaron una oleada de violencia brutal contra la población palestina en la Cisjordania ocupada, tras los mortíferos atentados del 7 de octubre perpetrados por Hamás y otros grupos armados palestinos en el sur de Israel. Esta investigación puso de relieve que las fuerzas israelíes habían cometido homicidios ilegítimos, en especial al usar la fuerza letal sin necesidad o de forma desproporcionada durante protestas y operaciones de detención, y al negar asistencia médica a las personas heridas.
Amnistía Internacional también ha documentado el vertiginoso aumento de la violencia de los colonos contra la población palestina, con el respaldo del Estado. Estas constantes siguen sin dar tregua, ya que las fuerzas israelíes también han intensificado el uso de los arrestos, incluidas las detenciones arbitrarias, para sofocar cualquier atisbo de disidencia palestina.