“Debemos hablar del pasado para evitar que se repita”: Un millar de jóvenes conmemoran el genocidio de romaníes en la Segunda Guerra Mundial

Por Fotis Filippou, coordinador de campañas de Amnistía Internacional para Europa y Asia Central, y Anna Leichtfried, coordinadora de la campaña Combatir la Discriminación en Europa

El 2 de agosto de 1944, un total de 2.897 hombres, mujeres y niños romaníes y sinti del “campamento de gitanos” (Zigeunerlager) del campo de concentración de Auschwitz-Birkenau fueron conducidos en camiones a las cámaras de gas del Crematorio V y asesinados en masa como parte del genocidio de Hitler.

Éstos fueron los trágicos acontecimientos desatados durante una sola noche. A lo largo de la Segunda Guerra Mundial, unas 23.000 personas fueron segregadas en el “campamento de gitanos” de Auschwitz. Alrededor de 20.000 murieron o fueron asesinadas en las cámaras de gas instaladas allí. Cuando terminó la guerra, se calculó que unos 500.000 romaníes y sinti habían sido asesinados o habían muerto debido a la persecución de los nazis por considerarlos seres “racialmente inferiores”.

A pesar de los horrores del exterminio de las comunidades romaní y sinti, la información y el reconocimiento oficial de este genocidio, o porraimos (“aniquilación”) en romaní, siguen siendo limitados en la actualidad.

Pero hay gente joven empeñada en cambiar esta situación. Están recordando el pasado para llamar la atención sobre la realidad que viven hoy día los romaníes en toda Europa, que suele caracterizarse por la discriminación, la marginación y la violencia.

El 2 de agosto de este año se cumplió el 70 aniversario del Genocidio de Romaníes. Del 30 de julio al 4 de agosto, 1.000 jóvenes –romaníes y no romaníes– de 25 países se congregaron en Cracovia y Auschwitz para rendir homenaje a las víctimas de las comunidades romaní y sinti. Gracias a la Iniciativa en Recuerdo del Genocidio de Romaníes, organizada por la Red Internacional de Jóvenes Romaníes (ternYpe), los participantes también tuvieron ocasión de reunirse con sobrevivientes y conocer más sobre este oscuro capítulo de la historia europea. Y de buscar maneras de solucionar las dificultades que siguen atravesando las comunidades romaníes en la actualidad.

De forma habitual sufren desalojos forzosos, escolarización segregada, falta de acceso al empleo y violencia e incitación al odio. Actualmente en Europa están más extendidos y se toleran más los prejuicios contra los romaníes que contra ninguna otra minoría étnica de la región.

Conviene no olvidar que son los mismos prejuicios que dieron lugar a los trágicos acontecimientos del genocidio.

Amnistía Internacional se sumó al homenaje y habló a los participantes sobre los motivos de que estuvieran conmemorando los trágicos acontecimientos de hace 70 años, y denunciando la discriminación de la comunidad romaní en la actualidad. Aquí podrás conocer a algunos.