La Comisión de Gobernación del Congreso debe rechazar la pena de muerte, dijo hoy Amnistía Internacional en una carta enviada a ese órgano. La organización envió la carta mientras la Comisión analiza un decreto que podría reactivar la pena capital en el país.
“La pena de muerte no contribuirá a resolver la crisis de seguridad pública que afecta a miles de personas en Guatemala porque esta pena no aborda temas claves como la calidad de las investigaciones criminales y la apropiada persecución penal,” dijo Susan Lee, Directora del Programa para las Americas de Amnistía Internacional.
Si el Congreso insiste en aprobar el Decreto, éste se convertirá en ley, dejando sin efecto la suspensión de la pena capital y abriendo las puertas a nuevas ejecuciones en Guatemala. Por otra parte, el decreto omite establecer claros criterios para conceder indultos e introduce la figura del “silencio administrativo negativo” a través del cual si el Presidente no emitiese decisión sobre un indulto en un lapso de 30 días, se entenderá tácitamente denegada la solicitud y se procederá a la ejecución.
“La única forma de disuadir el crimen es mediante la implementación de un sistema de justicia serio, eficaz y capaz de enfrentar la impunidad ante delitos, sea quienes fueren los responsables,” dijo Susan Lee.
“La pena de muerte es un castigo intrínsecamente cruel, inhumano y degradante tanto para el ejecutado como para la sociedad que la impone.”