Ocho hombres (Nayef Hamadneh, Iyad Hamadneh, Hani Rawabjeh, ‘Ala Shuli, Fallah Taher Nada, ‘Ala Rimawi, Maher ‘Awdeh y Wajih Ahmad ‘Arman) llevan casi un mes recluidos en régimen de incomunicación y en algunos casos no se ha reconocido su detención. Amnistía Internacional teme que puedan ser sometidos a torturas o malos tratos.