Las autoridades zimbabuenses siguen persiguiendo a activistas políticos

Las autoridades de Zimbabue no cejan en su persecución contra dos cargos del partido del primer ministro Morgan Tsvangirai, el Movimiento por el Cambio Democrático (MDC). Gandhi Mudzingwa y Kisimusi Dhlamini permanecen en un hospital de Harare bajo custodia policial desde el 20 de abril, a pesar de que el 17 de abril quedaron en libertad bajo fianza.

Los dos hombres están recibiendo tratamiento médico en la clínica Avenues de Harare después de haber sufrido presuntas torturas por parte de agentes de seguridad del Estado. El lunes 27 de abril, sus abogados presentaron al Tribunal Superior una solicitud urgente para que se retirara la vigilancia policial armada en el hospital.

Amnistía Internacional se ha dirigido por escrito a  las autoridades de Zimbabue pidiendo la retirada inmediata de la vigilancia policial.

“Su presencia equivale a la detención ilegal de unas personas a las que un tribunal de Zimbabue ha concedido la libertad bajo fianza”, afirmó Erwin van der Borght, director del Programa Regional para África de Amnistía Internacional, en una carta dirigida al Jefe de Policía de Harare.

Un juez del Tribunal Superior aplazó el fallo sobre la causa hasta el 30 de abril. Con anterioridad a la audiencia celebrada el 27 de abril, el ministerio público había presentado al tribunal una petición formal el 25 de abril alegando que los tres acusados habían sido liberados indebidamente y que debían ser enviados de nuevo a la prisión de máxima seguridad de Chikurubi.

Según los informes, la policía está buscando al periodista independiente Andrison Manyere, que quedó en libertad bajo fianza al mismo tiempo que Gandhi Mudzingwa y Kisimusi Dhlamini. Hasta el momento la policía no lo ha podido localizar.

Los tres hombres habían quedado en libertad bajo fianza el 17 de abril de 2009, ya que el ministerio público no presentó la notificación de su intención de recurrir la orden de libertad en el plazo de siete días estipulado por la ley. Sus abogados depositaron la fianza ante el tribunal de primera instancia de Harare.   Tras el pago de la fianza, se expidieron sendas “órdenes de libertad” en virtud de las cuales Gandhi Mudzingwa, Kisimusi Dhlamini y Andrison Manyere quedaron en libertad.