Pedro Henrique, de 31 años, fue asesinado a tiros por unos encapuchados. Cuatro años después, los agentes de policía presuntamente responsables del homicidio siguen en activo, y el juicio no ha comenzado aún. Apoya a Ana Maria, la madre de Pedro Henrique, exigiendo justicia por la muerte de su hijo.
¿Cuál es el problema?
Ana Maria Santos Cruz es una buena madre. Le gusta ir a conciertos y actos culturales con su hija, en Salvador (Brasil). Sin embargo, desde que murió su hijo Pedro, siente que le han arrebatado algo.
En su breve vida, Pedro llegó muy lejos. Como activista y defensor de la justicia racial y los derechos humanos, organizaba los “paseos de la paz” en Tucano (estado de Bahía). En estas marchas anuales se reunía gente para señalar los abusos policiales dirigidos especialmente contra las comunidades negras.
Esos momentos solidarios se encontraron con hostilidad e intimidación por parte de la policía.
Los agentes comenzaron a vigilar a Pedro, al que amenazaron y agredieron con violencia por su activismo. El 27 de diciembre de 2018, Pedro fue asesinado. Tres encapuchados irrumpieron en su casa mientras él dormía junto a su novia y le dispararon ocho veces en la cabeza y el cuello. La novia reconoció a los tres hombres como policías.
Los agentes presuntamente responsables de matar a Pedro Henrique fueron acusados en 2019, pero han pasado casi cinco años y siguen trabajando en la policía, y el juicio no ha comenzado aún.
Pese a las amenazas constantes y el dolor de haber perdido a su hijo, Ana Maria ha tratado denodadamente de encontrar la verdad sobre su muerte y ha pedido a las autoridades que realicen una investigación exhaustiva y un juicio.
¿Cómo puedes ayudar?
Firma la petición y pide una investigación independiente e imparcial sobre el homicidio de Pedro Henrique.