Amnistía Internacional acoge con satisfacción la adopción hoy, 20 de noviembre de 2008, en la Tercera Comisión de la Asamblea General de la ONU de una segunda resolución en la que se pide una moratoria mundial sobre el uso de la pena de muerte. En comparación con el año pasado, ha aumentado el número de países que han votado en favor de la resolución y ha descendido el de países en contra; asimismo, la resolución ha tenido más copatrocinadores.
“El aumento del apoyo a la resolución de este año es muy importante –ha manifestado Yvonne Terlingen, directora de la Oficina de Amnistía Internacional ante la ONU-. Demuestra una vez más que el mundo continúa por el camino de la abolición de la pena de muerte.” Es significativo que en la Liga de los Estados Árabes un país haya votado a favor de la resolución, 10 se hayan abstenido o hayan estado ausentes y 10 hayan votado en contra. Este resultado es notablemente mejor que el del año pasado, cuando un país votó a favor, cinco se abstuvieron o estuvieron ausentes y 15 votaron en contra. En comparación con el año pasado, han cambiado de postura nada menos que cinco países que habían votado en contra, se habían abstenido o habían estado ausentes.
En total, 105 países han votado a favor de la resolución, 48 lo han hecho en contra y 31 se han abstenido (frente a 104, 54 y 29 del año pasado), Han copatrocinado la resolución 89 países, dos más que el año pasado. Una pequeña minoría de países partidarios de la pena de muerte, propusieron una serie de modificaciones, todas las cuales fueron rechazadas por abrumadora mayoría.
“Felicitamos a los Estados que han impuesto una moratoria o han tomado medidas para restringir el uso de la pena de muerte –ha señalado Yvonne Terlingen-. Instamos a todos los Estados que siguen llevando a cabo ejecuciones –incluido Japón, donde aumentó, de hecho, su número el año pasado- a que tomen de inmediato medidas para poner en práctica la resolución y establecer la moratoria.” Información complementaria
Amnistía Internacional se opone a la pena de muerte porque considera que es irrevocable y existe siempre la posibilidad de ejecutar a una persona inocente en cualquier país donde siga imponiéndose. La pena de muerte es de por sí arbitraria y discrimina a quienes son pobres, sufren marginación o pertenecen a una minoría.
Hasta la fecha, noviembre de 2008, han abolido la pena de muerte en su legislación o en la práctica 137 países. Durante 2007, al menos 1.252 personas fueron ejecutadas en 24 países. Al menos 3.347 personas fueron condenadas a muerte en 51 países. [https://www.amnesty.org/es/death-penalty]
El descenso del número de países que llevan a cabo ejecuciones es espectacular. En 1989 lo hacían 100 Estados. En 2007, Amnistía Internacional registró ejecuciones en 24 países.
En diciembre de 2007,la Asamblea General de la ONU aprobó su primera resolución contra la pena de muerte, “Moratoria de la aplicación de la pena capital”(62/149), en la que se reafirma el compromiso de la ONU con su abolición. Se aprobó por 104 votos a favor, 54 en contra y 29 abstenciones.
Coincidiendo con el debate sobre la pena de muerte, Amnistía Internacional organizó un grupo de discusión con jueces y fiscales de Japón, Jordania, Nigeria y Estados Unidos. Los participantes explicaron a los representantes de la organización por qué incluso los sistemas judiciales más avanzados no pueden evitar que se cometan errores fatales en casos de pena de muerte y por qué se oponen ahora a la pena de muerte.
Para más información, pónganse en contacto con Yvonne Terlingen, directora de la Oficina de Amnistía Internacional ante la ONU Tel.: + 1212 867 8878 ext. 2 Móvil: + 1917 406 1185