Ex presidente argentino, declarado culpable de crímenes de lesa humanidad

Amnistía Internacional ha acogido con satisfacción la condena impuesta a un ex presidente argentino por crímenes de lesa humanidad cometidos en las décadas de 1970 y 1980. El ex general Jorge Videla ha sido declarado culpable de matar a disidentes durante la “guerra sucia” de Argentina, periodo de gobierno militar que se prolongó de 1976 a 1983. De 85 años de edad, el que fuera presidente de facto de Argentina entre 1976 y 1981, tras convertirse en el primer jefe de la junta militar, ha sido declarado responsable penalmente de la tortura y muerte de 31 personas detenidas en Córdoba. El miércoles, un tribunal de la ciudad de Córdoba declaró también culpables de los asesinatos a otros 29 oficiales, entre ellos el general Luciano Benjamín Menéndez, condenado también a cadena perpetua. “Esta sentencia representa otro importante avance en la lucha contra la impunidad –ha manifestado Guadalupe Marengo, directora adjunta del Programa de Amnistía Internacional para América–. Finalmente, los responsables de los graves abusos contra los derechos humanos cometidos durante los pasados regímenes militares están respondiendo ante la justicia.” Videla estaba cumpliendo ya cadena perpetua por abusos cometidos durante la “guerra sucia”. En 2008 se había dictado una nueva orden de detención contra él por su presunta participación en centenares de casos de desaparición forzada, tortura y ejecución extrajudicial. Los jueces de Córdoba han determinado que debe cumplir cadena perpetua por el asesinato de los 31 activistas de izquierdas, a quienes fusilaron poco después de que los militares tomaran el poder. Durante el gobierno militar de Argentina, millares de personas fueron víctimas de desaparición forzada, ejecución extralegal y tortura.Las leyes de amnistía de Argentina, que impedían el procesamiento de los miembros de las fuerzas de seguridad de seguridad, se anularon en junio de 2005, dos decenios después de su introducción, llevada a cabo por el gobierno del presidente Raúl Alfonsín entre 1986 y 1987. Según datos oficiales, al final de este año habrán sido declaradas culpables de participación en las violaciones de derechos humanos cometidas durante los pasados regímenes militares 110 personas. Se enfrentan a cargos penales otras 820, y se están celebrando 13 juicios. A pesar de los avances realizados en los esfuerzos por llevar ante la justicia a los autores de las violaciones de derechos humanos cometidas en el pasado, en un informe de la Corte Suprema de Justicia de Argentina se admite que se han producido demoras, particularmente en tribunales provinciales. “Es alentador que Argentina esté avanzando en la buena dirección para poner fin a la impunidad de las violaciones de derechos humanos del pasado –ha manifestado Guadalupe Marengo–. La búsqueda de justicia para las víctimas y sus familias debe continuar sin demora y con los medios necesarios para garantizar que se acaba con la impunidad.”