Siria: La votación del Consejo de Seguridad envalentonará a los responsables de abusos

El hecho de que el Consejo de Seguridad de la ONU no haya brindado hoy mejor protección a la población siria desde el punto de vista de los derechos humanos envalentonará a los responsables de los delitos y la violencia que asuelan el país, ha manifestado Amnistía Internacional. 

Rusia y China han vetado hoy, jueves, una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU en la que se proponía aplicar el plan de paz de seis puntos del enviado internacional, Kofi Annan, con arreglo al capítulo 7 de la Carta de la ONU, que permite al Consejo de Seguridad autorizar la imposición de diversas sanciones diplomáticas y económicas al gobierno sirio si no deja de utilizar armas pesadas ni retira las tropas de las ciudades. 

Es la tercera vez que Rusia y China utilizan su poder de veto para bloquear resoluciones del Consejo de Seguridad sobre Siria. 

El veto llega un día después de un atentado que ha matado al ministro y al viceministro de Defensa sirios y al adjunto del vicepresidente. Se ha recibido además información según la cual también han resultado heridos de gravedad otros altos cargos, entre ellos el ministro del Interior.

“Con la violencia intensificándose en todo el país, incluida la capital, Damasco, y dado que hay indicios de que los miembros de las fuerzas de seguridad sirias continúan cometiendo crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra, así como creciente información sobre abusos cometidos por la oposición armada, el Consejo de Seguridad tenía una oportunidad decisiva no sólo de renovar el mandato de la misión de la ONU en Siria, sino también de mejorarlo y reforzarlo”, ha señalado Ann Harrison, directora adjunta del Programa de Amnistía Internacional para Oriente Medio y el Norte de África. 

“Pero, en vez de ello, Rusia y China han vetado una vez más una resolución sobre la situación en Siria, frustrando la acción del Consejo de Seguridad y poniendo de relieve la incapacidad de sus miembros para superar las diferencias políticas en bien de la población siria.” 

“El veto de hoy envalentonará aún más a quienes, en todas las partes en el conflicto, están ordenando cometer y cometiendo abusos y delitos con impunidad.”

Amnistía Internacional ha pedido al Consejo de Seguridad que garantice que la Misión de Supervisión de Naciones Unidas en Siria (UNSMIS), cuyo mandato termina el viernes próximo, se renueva y refuerza, incorporando expresamente un componente de derechos humanos con personal suficiente y proporcionado a la misión expertos suficientes –incluso sobre cuestiones de género y sobre los derechos de la infancia– y otros recursos para documentar y denunciar los crímenes de lesa humanidad, crímenes de guerra y otros abusos graves contra los derechos humanos cometidos por todos los bandos. 

“Ahora es imperativo que, como mínimo, el Consejo de Seguridad renueve el mandato de la UNSMIS. Si no lo hace, se entenderá en general que la comunidad internacional ha abandonado una vez más a la población siria. Es probable que entonces se agrave aún más la situación de los derechos humanos y humanitaria”, ha añadido Harrison.

Amnistía Internacional ha pedido también reiteradamente al Consejo de Seguridad que remita la situación en Siria a la fiscal de la Corte Penal Internacional, que congele los activos del presidente sirio y sus allegados y que imponga de inmediato un embargo de armas con el que poner fin a las transferencias de armas al gobierno sirio. 

Asimismo, Amnistía Internacional pide a los gobiernos que están considerando la posibilidad de suministrar armas a los combatientes de la oposición que hagan primeramente una rigurosa evaluación, basada en información objetiva, para garantizar que no hay riesgo sustancial de que esas armas se utilicen para cometer o facilitar violaciones de derechos humanos, incluidos delitos de derecho internacional. Si existe tal riesgo, no debe llevarse a cabo la transferencia. 

Desde marzo de 2011, la organización ha documentado constantes violaciones de derechos humanos cometidas por las fuerzas de seguridad sirias y que constituyen crímenes de lesa humanidad. También ha documentado crímenes de guerra cometidos por el ejército desde que la situación degeneró en conflicto armado de carácter no internacional.

Aunque la mayoría de los abusos contra los derechos humanos documentados por Amnistía Internacional son obra de las fuerzas armadas y de seguridad del Estado, también los grupos armados de oposición han cometido abusos. 

Entre tales abusos figuran tortura y homicidios de soldados y miembros de la shabiha, milicia afín al gobierno, capturados, así como secuestros y homicidios de personas de las que se sabía o se sospechaba que prestaban apoyo y colaboración al gobierno y a sus fuerzas de seguridad y milicias.

“Hay ya un conflicto armado de carácter no internacional en toda Siria. Por consiguiente, todas las partes en él tienen la obligación jurídica de cumplir las normas del derecho internacional humanitario. Tienen prohibido efectuar ataques directos contra civiles y ataques indiscriminados o desproporcionados”, ha explicado Harrison. 

“Todas la partes deben dispensar en todo momento un trato humano a toda persona en su poder, incluidos los combatientes capturados. Asimismo, no deben utilizar armas prohibidas. Quienes cometan u ordenen cometer graves violaciones del derecho internacional humanitario pueden ser procesados por crímenes de guerra.”