La Conferencia de Donantes de Tokio debe ser un “punto de inflexión” para los derechos humanos en Afganistán

El dinero destinado a Afganistán puede marcar una diferencia duradera para el pueblo afgano, pero sólo si aborda los derechos de las mujeres, brinda una seguridad basada en los derechos humanos y ayuda a los cientos de miles de personas desplazadas que han quedado en la miseria a causa de los años de conflicto. Así lo ha manifestado Amnistía Internacional.

La segunda Conferencia Internacional de Donantes de Tokio, que se celebrará el 8 de julio, reunirá a 70 organizaciones internacionales y donantes para obtener fondos y apoyo para Afganistán más allá de 2014. 

La reunión tiene lugar una década después de celebrarse la primera conferencia de este tipo en la capital de Japón. 

“Es un momento crítico. Se está ofreciendo dinero, pero necesitamos confirmación de que ese dinero se destinará a mejoras en materia de derechos humanos que supongan una diferencia para la vida de la población afgana”, ha manifestado Horia Mosadiq, investigadora de Amnistía Internacional sobre Afganistán.

“Mientras las tropas internacionales planean su retirada, necesitamos garantías de que se abordan las necesidades de medio millón de afganos desplazados por el conflicto, continúan las mejoras en cuanto a los derechos de las mujeres y se dota a las fuerzas afganas de los recursos necesarios para investigar las bajas civiles e indemnizar por ellas.”

“El gobierno afgano y sus socios donantes deben hacer de Tokio un punto de inflexión: deben cumplir sus promesas al pueblo afgano y reforzar los frágiles progresos en derechos humanos tan duramente logrados durante la última década.”

La conferencia está orientada hacia el desarrollo sostenible de Afganistán más allá de 2014, cuando se complete el traspaso de la responsabilidad en materia de seguridad de las fuerzas estadounidenses y de la FIAS al gobierno afgano, y cuando las tropas de combate de la OTAN completen su retirada.

“La conferencia debe garantizar que todas las naciones de la FIAS y la OTAN investigan adecuadamente las denuncias de bajas y daños civiles causados por operaciones militares internacionales, y debe proporcionar reparación efectiva –que incluya indemnización– antes de que las tropas se retiren en 2014, para no dejar un legado de reclamaciones no resueltas”, ha manifestado Mosadiq.

La situación de las personas internamente desplazadas en Afganistán sigue siendo crítica. 

En febrero de este año, un informe de Amnistía Internacional documentó cómo, a medida que se han intensificado el conflicto y la inseguridad, el número de personas afganas desplazadas ha alcanzado la cifra récord de medio millón. Estas personas subsisten en condiciones terribles en asentamientos precarios urbanos, privadas de su derecho a una vivienda adecuada, alimento, agua, salud y educación.

El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) calcula que, para final de 2013, habrá en Afganistán 700.000 personas internamente desplazadas.

“El creciente problema del desplazamiento constituye una crisis de derechos humanos y podría dar lugar a una mayor inestabilidad en las zonas urbanas, por lo demás relativamente estables. El gobierno afgano y sus socios internacionales deben abordar esta cuestión, largamente desatendida”, ha manifestado Horia Mosadiq. 

El gobierno afgano ha pedido a la comunidad internacional ayuda económica, para el desarrollo y de seguridad y, según el Banco Mundial, se espera que proponga una ayuda extranjera de hasta 4.000 millones de dólares estadounidenses anuales en concepto de ayuda al desarrollo hasta 2017.

Sin embargo, esta petición se realiza frente a un trasfondo de lentos progresos en materia de derechos humanos. 

Aunque ha habido algunas mejoras –como la aprobación de leyes relativas a los derechos humanos, una mejora de los derechos de mujeres y niñas, un mayor acceso a la educación y a la atención médica primarias y la aparición de una dinámica comunidad de periodistas–, estos logros corren peligro.

“Los progresos en materia de derechos humanos se están viendo cada vez más socavados por la inseguridad y la falta de respeto por el Estado de derecho, por el floreciente tráfico de narcóticos, y por un sistema de justicia inoperante, una mala gobernanza, una corrupción endémica y una pobreza sistémica”, ha manifestado Mosadiq.

“Los participantes en la conferencia de Tokio deben comprometerse a establecer unos parámetros creíbles y cuantificables para supervisar el progreso en materia de derechos humanos, como por ejemplo la libertad de expresión y medios de comunicación, la participación política de las mujeres, el número de escuelas abiertas en una zona determinada, el índice de escolarización, el acceso de las mujeres a la atención médica y las tendencias respecto a la mortalidad materna e infantil.”

Amnistía Internacional pide que los programas de promoción de los derechos de las mujeres y la igualdad de género reciban en Tokio fondos adecuados, y que el gobierno afgano y sus socios internacionales garanticen que las mujeres afganas gozan de una representación significativa y ven reflejados sus motivos de preocupación durante las conversaciones sobre reconciliación.

“Los derechos de las mujeres y las niñas no deben venderse a cambio de alcanzar rápidamente unos acuerdos de paz con elementos de los talibanes y otros grupos insurgentes”, ha manifestado Horia Mosadiq.

Notas a periodistas

Si desean consultar el texto de la carta abierta de Amnistía Internacional a la Conferencia de Tokio, del 27 de junio de 2012, pinchen aquí: https://www.amnesty.org/en/library/info/ASA11/012/2012/en (en inglés)

El comunicado de prensa, con un enlace al informe Fleeing War, Finding Misery: The plight of the internally displaced in Afghanistan, del 23 de junio de 2012, pueden encontrarlos aquí: https://www.amnesty.org/en/news/afghans-fleeing-war-find-misery-urban-slu… (en inglés)

Para consultar el documento Afganistán, diez años después: progresos lentos y promesas incumplidas, del 6 de octubre de 2011, pinchen aquí: https://www.amnesty.org/es/news-and-updates/report/afganistan-10-anos-pro…

Si desean más información o concertar una entrevista, pónganse en contacto con la encargada de prensa, Katya Nasim: [email protected] + 44 207 413 5871 / +44 7904398103