Amnistía Internacional pide a los gobiernos de Europa que garanticen el derecho de las personas lesbianas, gays, bisexuales y transgénero a celebrar su identidad en las diversas manifestaciones y demás actos públicos que se celebran todos los años entre abril y noviembre con tal fin. “Igualdad ante la ley sin discriminación, este es el mensaje que los defensores y defensoras de los derechos gays llevan a la calle -ha señalado Nicola Duckworth, directora del Programa Regional para Europa y Asia Central de Amnistía Internacional-. Sin embargo, la mayoría de las veces se les impide hacerlo con seguridad.” En varios países, principalmente del este de Europa, las personas participantes en los actos del Orgullo Gay se enfrentan muy a menudo a amenazas y a la hostilidad oficial incluso antes de empezar a celebrarlos. Se burlan de ellas, les escupen, les pegan puñetazos y les arrojan botellas, huevos y excrementos, a veces delante mismo de la policía. El 11 de mayo, 60 personas que pretendían viajar a la capital moldava para participar en la marcha del Orgullo Gay, pese a que, una vez más (la sexta ya) se había prohibido, fueron rodeadas por un grupo de manifestantes casi tres veces más numerosos, que subieron a su autobús forzando las puertas y les quitaron las pancartas y banderas que llevaban mientras la policía lo observaba todo desde media docena de vehículos de patrulla aparcados cerca de allí. Ni siquiera el festival de la canción de Eurovisión, que se celebrará en Belgrado del 20 al 24 de mayo, tiene garantizada la ausencia de acciones en contra de los gays. En Serbia, donde los problemas de seguridad han impedido a la Alianza Homo y Hetero organizar un acto de celebración del Orgullo Gay, un grupo extremista amenazó con agredir a toda persona de apariencia gay o lesbiana en el evento. En varios países del este de Europa, algunos actos están totalmente prohibidos, lo que constituye una violación del derecho internacional. Las autoridades no cumplen con sus obligaciones, aduciendo problemas de seguridad o violación de lo que consideran valores espirituales o morales. Amnistía Internacionales hace campaña en favor del derecho de las personas lesbianas, gays, bisexuales y transgénero a no sufrir agresiones físicas, insultos ni amenazas, a reunirse y organizar actos libremente y a recibir la debida protección de los agentes encargados de hacer cumplir la ley. A finales de este mes y por segundo año consecutivo, activistas de Amnistía Internacional de más de 20 países participarán en la marcha del Orgullo Gay de Riga en señal de apoyo y solidaridad internacional. La marcha demostrará hasta qué punto está extendido el respeto de la igualdad. “Sin importarles los obstáculos que encuentran en su camino, las personas que luchan por los derechos de lesbianas y gays están reivindicando sus derechos humanos -ha manifestado Nicola Duckworth-. Los gobiernos tienen que cumplir con sus obligaciones.”
Para más información sobre la marcha del Orgullo Gay de Riga de 2008, véase https://www.facebook.com/group.php?gid=13480432185
Información complementaria En 2005 se prohibió inicialmente en Riga la marcha del Orgullo Gay. Al final se celebró, pero sin la debida protección policial. En 2006 volvió a prohibirse, y las autoridades tampoco ofrecieron protección policial adecuada a las personas asistentes a un acto que se celebró en un lugar cerrado. El año pasado, más de 400 personas, entre las que había activistas de Amnistía Internacional de toda Europa, celebraron una marcha en un parque cerrado del centro de Riga. Por tercer año consecutivo, las autoridades municipales de Moscú han negado a los activistas de los derechos de gays y lesbianas el permiso para celebrar una marcha en mayo de este año. Hay pendientes en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos recursos de apelación contra las prohibiciones anteriores. En Croacia, algunos grupos celebrarán actos del Orgullo Gay en Zagreb a finales de junio. En 2006 y 2007, aunque había casi dos veces más agentes de policía que manifestantes, no fue posible protegerlos de las agresiones dirigidas contra ellos durante las marchas y después de ellas.
En 2007, el alcalde de Vilna denegó el permiso necesario para la escala que tenía previsto hacer en la capital lituana una gira en camión en contra de la discriminación, patrocinada por la Unión Europea en el marco de la campaña de información “Por la Diversidad. Contra la Discriminación”. Asimismo, el gobierno municipal votó por unanimidad prohibir una contracción organizada en el contexto de una campaña por la tolerancia en apoyo de los derechos humanos de varios grupos, incluidos las lesbianas y los gays. La Comisión Europea criticó las prohibiciones. Los tribunales polacos y el Tribunal Europeo de Derechos Humanos han determinado que la prohibición de los actos del Orgullo Gay en las ciudades polacas son ilegales. En la marcha de Varsovia de 2007 se alcanzó la cifra récord de 5.000 simpatizantes y hubo pocas protestas, y en Cracovia se celebró una marcha más pequeña sin incidentes de importancia.
Croacia, Letonia, Lituania, Polonia, Moldavia y Servia figuran entre los 54 Estados que, en 2006, firmaron en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU una declaración en la que se expresaba profunda preocupación por las violaciones de derechos humanos que se estaban cometiendo contra las personas lesbianas, gays, bisexuales y transgénero y se reconocía que los principios de universalidad y ausencia de discriminación obligaban a abordar esta cuestión.
Documento público **************************************** Si desean más información pónganse en contacto con la oficina de prensa de Amnistía Internacional en Londres, llamando al número + 44 20 7413 5566 o escribiendo por correo electrónico a [email protected]
Amnistía Internacional, Secretariado Internacional, 1 Easton St., London WC1X 0DW, Reino Unido www.amnesty.org