Marruecos: Periodista en el punto de mira de las autoridades se enfrenta a juicio

El periodista marroquí Omar Radi comparece hoy en juicio tras permanecer nueve meses en detención preventiva ilegal, en medio de la profunda preocupación expresada por la imparcialidad de las actuaciones; así lo ha manifestado hoy Amnistía Internacional. La organización pide a las autoridades marroquíes que liberen de la detención preventiva a Omar Radi, retiren todos los cargos en su contra basados en su labor periodística y garanticen un juicio imparcial a todas las partes.

“No hay justificación posible para la detención preventiva de Omar Radi durante estos nueve meses, y pedimos su puesta en libertad. Omar Radi lleva años sufriendo el acoso judicial de las autoridades debido a su valiente labor periodística, y este juicio es un intento más de acallarlo”, ha declarado Amna Guellali, directora adjunta de Amnistía Internacional para Oriente Medio y Norte de África. 

Omar Radi lleva años sufriendo el acoso judicial de las autoridades debido a su valiente labor periodística, y este juicio es un intento más de acallarlo.

Amna Guellali, Amnistía Internacional

El periodista independiente Omar Radi es conocido por sus críticas del historial de derechos humanos de Marruecos y por destapar la corrupción, y ha sufrido frecuentes actos de hostigamiento judicial a manos de las autoridades por su periodismo y activismo. En marzo de 2020 se le impuso una condena condicional de cuatro meses de prisión por un tuit que había publicado el año anterior en el que criticaba a un juez por el juicio injusto y encarcelamiento de activistas de Hirak El-Rif. 

En junio de 2020, Amnistía Internacional oublicó un informe en el que revelaba que el teléfono de Omar Radi había sufrido un ataque con un sofisticado programa espía de NSO Group que sólo podía provenir de las autoridades. El informe tuvo amplia difusión y las autoridades se defendieron negando toda vigilancia ilegal y asegurando al mismo tiempo que Omar Radi estaba involucrado en actividades de espionaje. 

El 24 de junio, dos días después de la publicación del informe, la policía judicial de Casablanca citó a Omar Radi por primera vez para interrogarlo. Fue citado en al menos ocho ocasiones más e interrogado durante horas cada vez, al principio sólo en relación con acusaciones de presunta financiación extranjera asociada a grupos de inteligencia. Más adelante se añadió el cargo de violación, tras la denuncia formulada por una compañera del diario Le Desk, quien acusaba a Omar Radi de haberla agredido la noche del 12 de julio de 2020.

El 29 de julio de 2020, la fiscalía adscrita al tribunal de primera instancia de Casablanca presentó múltiples cargos contra Omar Radi, incluidos los de espionaje (por su labor periodística y de investigación para varias ONG internacionales), violación y agresión sexual, todos los cuales él niega rotundamente. Ese mismo día fue puesto en detención preventiva en la prisión de Oukacha.

Las acusaciones de violencia sexual siempre deben tomarse en serio e investigarse debidamente. No obstante, en los últimos años ha habido varios casos en los que se han presentado cargos por delitos sexuales contra personas abiertamente críticas con el gobierno marroquí, como activistas y periodistas independientes.

En 2015, las autoridades procesaron a Hicham Mansouri, periodista y cofundador de la Asociación Marroquí de Periodismo de Investigación, por “adulterio” y “explotación sexual”. Cuando quedó en libertad tras pasar 10 meses en la cárcel, decidió exiliarse en Francia.

En 2019, un tribunal de apelación marroquí condenó a Taoufik Bouachrine, editor de Akhbar El-Youm —uno de los pocos periódicos de oposición que quedan en el país—, a 15 años de prisión por agresión sexual a varias mujeres. En su opinión sobre este caso, el Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria concluye que su juicio estuvo empañado por violaciones del debido proceso y considera que la detención de Bouachrine forma parte de un “hostigamiento judicial que sólo puede atribuirse a su periodismo de investigación”.

Hajar Raissouni, otra destacada periodista del periódico Akhbar El-Youm, fue condenada a un año de prisión por los cargos de “aborto” y “relaciones sexuales fuera del matrimonio” en 2019. 

El redactor jefe del periódico, Suleiman Raissouni, también está detenido desde el 22 de junio de 2020, por presunta agresión sexual a un hombre dos años antes. 

El periodista independiente Imed Stitou, testigo de la defensa en la causa por violación contra Omar Radi y que había estado presente en el piso en el momento de los hechos, confirmó la versión de Omar y más tarde fue acusado formalmente de complicidad en la violación. Está previsto que Imed Stitou también comparezca en juicio hoy.

Esta detención tiene lugar en el contexto del progresivo deterioro de la trayectoria del gobierno marroquí en materia de derechos humanos observado en los últimos dos años, en el que las autoridades han procesado a decenas de personas —entre periodistas, youtubers, artistas y activistas— que expresaron opiniones críticas con las autoridades en Internet y otros lugares. 

Información complementaria

Omar Radi, periodista de investigación y activista de Marruecos, es fundador y periodista de Le Desk, un sitio web marroquí de noticias independiente. Ha trabajado con varios medios de comunicación nacionales e internacionales, entre ellos Atlantic Radio, Le Journal Hebdomadaire, TelQuel y Lakome. El trabajo de Omar se centra en la investigación política y las relaciones entre los poderes políticos y económicos de Marruecos.