China: Vergonzosa condena a cuatro años y medio de cárcel para el abogado de derechos humanos Wang Quanzhang

Es indignante que se esté castigando a Wang Quanzhang por defender pacíficamente los derechos humanos en China.

Doriane Lau, investigadora de Amnistía Internacional sobre China

En respuesta a la condena de cuatro años y medio impuesta por un tribunal chino al abogado de derechos humanos Wang Quanzhang por “subversión del poder del Estado”, Doriane Lau, investigadora de Amnistía Internacional sobre China, ha declarado:

“La sentencia dictada hoy es una injusticia flagrante. Es indignante que se esté castigando a Wang Quanzhang por defender pacíficamente los derechos humanos en China. Debe ser puesto en libertad de inmediato y sin condiciones.”

“En los tres años que precedieron a su simulacro de juicio, las autoridades hicieron desaparecer a Wang Quanzhang en un agujero negro, donde probablemente fue torturado. Su familia, que sigue siendo hostigada por las autoridades, hasta hace poco ni siquiera sabía si estaba vivo, y mantenerlo en prisión no hace más que prolongar el sufrimiento de sus seres queridos”.

Información complementaria

Wang Quanzhang era el último abogado que aguardaba sentencia en relación con la represión masiva que lanzó el gobierno chino en 2015 contra casi 250 activistas y abogados y abogadas de derechos humanos.

El Tribunal Popular Intermedio Municipal Número 2 de Tianjin ha dictado sentencia sobre su caso hoy. Wang Quanzhang fue juzgado el 26 de diciembre de 2018 tras pasar más de tres años detenido en espera de juicio. Las autoridades impidieron a su esposa, Li Wenzu, que saliera del complejo de apartamentos en el que vive para evitar que asistiera al juicio.

Wang Quanzhang fue detenido inicialmente por la policía el 3 de agosto de 2015, pero hasta julio de 2018 su familia no supo, a través de un abogado, que estaba vivo y recluido en Tianjin.

Antes de ser detenido, Wang Quanzhang trabajaba en asuntos considerados delicados por el gobierno chino, como la defensa de la libertad religiosa y la representación de miembros del Movimiento Nuevos Ciudadanos, red de activismo de base que promueve la transparencia en el gobierno y denuncia la corrupción. Debido a su papel en la defensa de estos casos, Wang había sido intimidado con frecuencia.