Gambia: El presidente Jammeh debe retirar su llamamiento a la ejecución de personas condenadas a muerte

Las declaraciones del presidente de Gambia Yahya Jammeh, en las que afirmó que personas condenadas a muerte en Gambia serán ejecutadas antes de septiembre, deben retirarse y no convertirse en realidad, ha afirmado hoy Amnistía Internacional.El presidente Jammeh hizo estas declaraciones en un discurso televisado que se emitió la noche del domingo y se repitió el lunes para conmemorar la festividad musulmana de Eid al Fitrt.Si se llevan a cabo estas ejecuciones, supondría el fin de 27 años sin ejecuciones en Gambia, ya que el último se llevo a cabo en 1985.Actualmente, Amnistía Internacional considera a Gambia como abolicionista en la práctica, y, por tanto, lo incluye entre los 141 países [más de dos tercios de los Estados] del mundo que han eliminado la pena de muerte en la ley o en la práctica. “Los comentarios del presidente Jammeh son sumamente inquietantes, y sin duda provocarán una gran angustia a las personas condenadas a muerte y a sus familias”, ha afirmado Audrey Gaughran, directora del Programa para África de Amnistía Internacional. “Cualquier intento de convertir esta amenaza en realidad sería una auténtica vergüenza y un importante retroceso para los derechos humanos en Gambia.”“La declaración del presidente supone un marcado contraste con la tendencia, tanto en África occidental como en el resto del mundo, hacia el fin de la aplicación de la pena de muerte.”No es la primera vez que el presidente Jammeh realiza amenazas de este tipo. En septiembre de 2009 anunció la reanudación de las ejecuciones para contrarrestar el aumento de la delincuencia. En octubre de ese año se atribuyeron al director de la Fiscalía declaraciones en las que afirmaba que todas las personas condenadas a muerte serían ejecutadas mediante ahorcamiento lo antes posible.Aunque no se llevaron a cabo ejecuciones después de estas declaraciones, la amenaza actual sigue constituyendo motivo de gran preocupación.Según el gobierno de Gambia, a 31 de diciembre de 2011 había 42 hombres y 2 mujeres condenados a muerte; 13 de ellos habían sido condenados ese mismo año. En Gambia la pena capital puede imponerse por asesinato y traición.“Los juicios injustos son habituales en el país; se sabe que las condenas a muerte se utilizan como instrumento contra la oposición política y que no se respetan las normas internacionales sobre juicios con garantías”, ha manifestado Audrey Gaughran.“El número de juicios manifiestamente injustos es escandaloso, y constituye un motivo de especial preocupación en los casos en los que se impone la pena de muerte.”Información complementariaEn los últimos años, ningún país de África occidental ha ejecutado a personas condenadas a muerte; en los últimos cinco años, en esta zona de África se ha abolido la pena de muerte para todos los delitos en Togo, y lo mismo ha ocurrido en Burundi, Gabón y Ruanda.En julio, Benín se convirtió en el 75 Estado del mundo en ratificar el Segundo Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, de1989, destinado a abolir la pena de muerte.Gambia es Estado Parte en la Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos. En 2008, la Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, el órgano de vigilancia de este tratado regional, adoptó una resolución en la que pedía a los Estados Parte en la Carta Africana que respetasen la moratoria de las ejecuciones de condenas a muerte con vistas a la abolición de la pena capital.En mayo de 2011, durante el periodo de sesiones de la Comisión en Banjul, Gambia, la presidenta del Grupo de Trabajo de la Comisión Africana sobre la Pena de Muerte en África afirmó que “la pena capital […] constituye la más grave violación del […] derecho a la vida establecido en el artículo 4 de la Carta Africana”.Según las normas internacionales, la pena de muerte sólo puede imponerse por delitos en los que existe intención de matar y se produce pérdida de vidas. Según la ONU, esto excluye la posibilidad de imponer condenas a muerte por actividades de carácter político, como la traición, el espionaje, y otros actos definidos de forma imprecisa y calificados de “delitos contra el Estado”.En lo que respecta a África, 38 de los 54 Estados miembros de la Unión Africana, también más de dos tercios, son abolicionistas en la ley (16) o en la práctica (22).Informe de Amnistía Internacional En el informe de Amnistía Internacional sobre condenas a muerte y ejecuciones en 2011 se afirma:En 2011 se impusieron en Gambia 13 nuevas condenas a muerte por asesinato y traición tras juicios que a menudo fueron flagrantemente injustos, aunque no se llevaron a cabo ejecuciones.En abril, el Tribunal de Apelación confirmó las condenas a muerte de siete de las ocho personas condenadas a esta pena en 2010 por conspirar para derrocar al gobierno.El 4 de abril, Gambia abolió la pena de muerte para los delitos de drogas, a los que se acababa de ampliar en 2010, y la sustituyó por cadena perpetua.También se introdujeron reformas en la Ley del Código Penal y en la Ley sobre Trata de Personas, de 2007, para hacerlas compatibles con la Constitución de 1997, cuyo artículo 17.2 prohíbe la pena de muerte para delitos que, sin implicar violencia o la administración de una sustancia tóxica, conlleven la muerte de otra persona.