Egipto pone en libertad a activista de derechos de los beduinos

Amnistía Internacional expresa su satisfacción por la excarcelación de un bloguero y activista beduino egipcio que ha estado recluido casi tres años sin cargos ni juicio en relación con las protestas contra la demolición de miles de viviendas en la península de Sinaí.

Musaad Suliman Hassan Hussein, conocido también por el seudónimo de Musaad Abu Fagr, fue excarcelado el martes de la prisión de Abu Zaabal, cerca de El Cairo. Su encarcelamiento se produjo en aplicación de la legislación de excepción a pesar de las reiteradas resoluciones judiciales que ordenaban su libertad.”La excarcelación de Musaad Abu Fagr es una buena noticia, pero las autoridades egipcias deben excarcelar ahora a todos los demás presos de conciencia, muchos de los cuales siguen consumiéndose en detención administrativa sólo por el ejercicio pacífico de su derecho a la libertad de expresión”, ha declarado Hassiba Hadj Sahraoui, directora adjunta del Programa para Oriente Medio y el Norte de África de Amnistía Internacional.Musaad Abu Fagr fue detenido el 26 de diciembre de 2007 tras la celebración de unas manifestaciones encabezadas por Wedna Nai (Queremos Vivir), movimiento por los derechos de los beduinos del que es cofundador.Musaad fue acusado de “incitación a otros a protestar”, “resistencia a las autoridades” y “agresión a funcionarios públicos durante el ejercicio de sus funciones”.Durante las manifestaciones de 2007 se produjeron enfrentamientos violentos entre varios miles de personas y las fuerzas de seguridad en el pueblo de Al Masoura, situado entre las poblaciones de Rafah y Al Arish, en el norte del Sinaí, cerca de la frontera con la Franja de Gaza.Los manifestantes exigían también permisos para construir viviendas, la propiedad de las tierras de cultivo en las que trabajaban y la libertad de los beduinos que fueron recluidos sin cargos ni juicio tras los atentados con bomba cometidos en Taba, Sharm al Sheikh y Dahab entre 2004 y 2006.En julio, un manifestante adolescente murió por heridas de bala y decenas más resultaron heridos.Tras su detención en diciembre de 2007, Musaad Abu Fagr fue encarcelado en la prisión de Borg al Arab, cerca de Alejandría.El 15 de febrero de 2008, tras una apelación de los abogados de Musaad Abu Fagr contra la orden de prisión preventiva impuesta a su cliente, el Tribunal de Apelación de Ismailia decretó su libertad.Sin embargo, el Ministerio del Interior hizo uso de las facultades que le confiere el estado de excepción en vigor en Egipto desde 1981 y dictó una orden administrativa para mantenerlo en prisión.Sus abogados presentaron una queja ante el Tribunal Supremo de Seguridad del Estado (para el estado de excepción), que ordenó su libertad.El Ministerio del Interior recurrió, y el 12 de mayo de 2008 otro tribunal confirmó la orden de libertad, a pesar de lo cual se dictó una nueva orden de detención administrativa contra Musaad Abu Fagr.En total, los abogados de Musaad Abu Fagr obtuvieron 18 órdenes judiciales de libertad para su cliente, todas las cuales fueron respondidas con una orden de detención administrativa.”Es lamentable que las autoridades decidieran hacer caso omiso durante tanto tiempo de las numerosas órdenes judiciales de libertad a favor de Musaad Abu Fagr”, afirmó Hassiba Hadj Sahraoui.Como resultado de las precarias condiciones higiénicas, Musaad Abu Fagr tuvo un absceso en un pie mientras estaba en la prisión de Borg al Arab, donde permaneció recluido un año.Las autoridades penitenciarias no le proporcionaron tratamiento médico, pero otro recluso que era médico le sometió a una operación quirúrgica sin anestesia.Musaad Abu Fagr se recuperó gracias a su familia y a su abogado, que le llevaron medicación para prevenir la infección.Musaad Abu Fagr ha agradecido a Amnistía Internacional la campaña por su libertad: “El apoyo de Amnistía Internacional es una de las razones por las que me han puesto en libertad —declaró a la organización—. Sus mensajes me hicieron sentir la solidaridad”.