Amnistía Internacional pide la libertad de tres hermanos tibetanos, activistas medioambientales galardonados por su labor, dos de los cuales han sido condenados recientemente a largas penas de prisión con una diferencia de una semana.Karma Samdrup, a quien la cadena de televisión estatal china CCTV nombró “filántropo del año” en 2006 por su labor en la conservación de los ríos, fue condenado la semana pasada a 15 años de prisión por “incitar al robo de reliquias culturales” en sepulcros, acusación que se había retirado en 1998.Karma Samdrup ha denunciado con detalles que lo torturaron en detención para obligarlo a confesar. Cuando compareció ante el tribunal en junio, había perdido tanto peso en seis meses que su esposa apenas pudo reconocerlo.La detención de Karma Samdrup se produjo en enero, cuando captaba apoyos para la excarcelación de sus dos hermanos, Rinchen Samdrup y Chime Nangyal, detenidos en agosto de 2009 después de que su galardonada ONG (dedicada a combatir la caza furtiva y a fomentar la reforestación) amenazara con denunciar a los funcionarios corruptos que cazaban ilegalmente animales en peligro de extinción.Rinchen fue condenado el sábado a cinco años de prisión después de un juicio rápido por “incitar a la escisión”, tras haber permanecido en detención sin juicio casi un año. La prueba clave para su condena fue un artículo en el que se mencionaba al Dalai Lama que, según insistió Rinchen, había sido publicado en su sitio web por otra persona.Los juicios de ambos hermanos han sido manifiestamente injustos; a sus abogados se les denegó en reiteradas ocasiones el acceso a sus clientes, así como a pruebas clave. Chime ya está cumpliendo 21 meses de “reeducación por el trabajo”, impuestos sin cargos ni juicio por “perjudicar la estabilidad social”, por recabar ilegalmente información local sobre medio ambiente y religión, y organizar “peticiones irregulares” de los residentes locales.La ONG de Rinchen y Chime había recibido amplios elogios en los medios de comunicación estatales chinos, así como el apoyo de la empresa Ford y de la Fundación Uno del actor Jet Li.”El activismo de Rinchen ha sido celebrado por periódicos estatales, que citaban a funcionarios locales del Partido Comunista, cuando ya estaba detenido”, ha declarado Catherine Barber, directora adjunta del Programa para Asia y Oceanía de Amnistía Internacional.”Las actuaciones contra esta familia apolítica son preocupantes, pues indican que las autoridades están ampliando la represión. Además, estos enjuiciamientos podrían poner en peligro el creciente activismo medioambiental que tanto necesita el país.”Las autoridades también están actuando en contra de la familia extensa de los hermanos. Uno de sus primos, Sonam Choephel, cumple un año y medio de “reeducación por el trabajo” por organizar un grupo para pedir justicia para Rinchen Samdrup en Pekín.Otro primo, Rinchen Dorje, que había sido intérprete de Karma Samdrup, fue detenido en marzo y se desconoce actualmente su paradero.
La Campaña Internacional por Tíbet ha denunciado que la policía, bajo la autoridad de un funcionario del Partido Comunista, dejó inconsciente de una paliza a la madre de Karma Samdrup, de unos 70 años, y que 20 habitantes de la zona natal de los tres hermanos fueron detenidos, interrogados y torturados después de haber presentado otra petición en Pekín.Desde que se produjeron las protestas y disturbios de 2008 en la Región Autónoma del Tíbet y en otras zonas tibetanas de China, las fuerzas de seguridad chinas actúan cada vez con más dureza contra los líderes culturales e intelectuales de la comunidad tibetana.