Represión de protestas pacíficas en Mauritania

Las autoridades mauritanas han reprimido violentamente dos manifestaciones pacíficas celebradas este mes.

En abril de 2009, dos manifestaciones a las que acudieron miembros de partidos políticos y de la sociedad civil fueron reprimidas con brutalidad. Los manifestantes pretendían protestar pacíficamente contra el calendario electoral impuesto por las autoridades que asumieron el poder tras el golpe de Estado militar de agosto de 2008,que derrocó al gobierno mauritano elegido en las elecciones presidenciales multipartidistas celebradas en marzo de 2007.

El 19 de abril, la policía empleó la fuerza para dispersar a un grupo de mujeres que intentaban organizar una sentada frente a la sede de Naciones Unidas en Nuakchot. Los agentes golpearon con porras y correas y propinaron patadas a numerosas mujeres, entre ellas ex ministras, parlamentarias y defensoras de los derechos humanos.

Una de las víctimas de la represión, Nebghouha Mint Mohamed Vall, ex ministra de Educación, relató a Amnistía Internacional: “Varios agentes de policía me golpearon. Perdí el velo y cuando mi hija intentó recuperarlo, a ella también la golpearon”. 

Otra manifestante, Chicha Mint Benna, hija del presidente del opositor Partido del Trabajo de Mauritania Mohamed El Hafedh Ould Denna, quedó inconsciente a consecuencia de los golpes recibidos y hubo de ser hospitalizada. 

Dos semanas antes, el 2 de abril, la policía había reprimido violentamente una manifestación organizada por la Coordinadora de Fuerzas Democráticas, una coalición formada por el partido de oposición Frente Nacional para la Defensa de la Democracia, federaciones de sindicatos, así como organizaciones de derechos humanos y de la sociedad civil. Los manifestantes protestaban contra la decisión de convocar elecciones presidenciales el 6 de junio de 2009, al considerarla un intento de legitimar el golpe militar de 2008.

Durante la manifestación, la policía golpeó al defensor de derechos humanos Boubacar Messaoud, presidente de la organización no gubernamental SOS Slaves. “Me golpearon en la espalda con porras hasta que perdí el conocimiento. El médico que me examinó más tarde dijo que el golpe que tenía en la nuca podía haberme matado”, declaró la víctima a Amnistía Internacional.

La policía también golpeó a varios parlamentarios, entre ellos Kobade Ould Cheick y Mohamed Moustapha Ould Bedredine, identificables por sus fajines oficiales, y utilizó gas lacrimógeno contra ellos.

Amnistía Internacional ha instado a las autoridades mauritanas a que respeten la libertad de expresión y de reunión y a que no hagan uso de la violencia.