Los organizadores de una exposición de arte ruso, acusados de apología del odio

Dos ciudadanos rusos podrían ser condenados a penas de hasta cinco años de cárcel por apología del odio o incitación a la animadversión y denigración de la dignidad humana tras organizar una exposición de arte contemporáneo en Moscú.   Yurii Samodurov y Andrei Yerofeev montaron la exposición Arte Prohibido 2006 en el Museo Sajarov en marzo de 2007.

Los dos hombres han apelado los cargos. El Tribunal Municipal de Moscú examinará el lunes sus apelaciones y decidirá si seguir adelante con el caso o remitirlo a la fiscalía para profundizar en su investigación. En la vista de apelación se estudiará también si la fiscalía debe resolver violaciones de procedimiento. Hasta ahora el tribunal ha rechazado todos los recursos presentados por la defensa.

Cuando se presentaron los cargos, en mayo de 2008, Yurii Samodurov era director del Centro Sajarov y Andrei Yerofeev, comisario de la exposición, jefe del Departamento de Arte Contemporáneo en la Galería Estatal Tretiakov de Moscú.

La exposición reunía diversas obras de arte que habían sido rechazadas en varias exposiciones de 2006. Algunas de ellas ya se habían mostrado en otras exposiciones de arte contemporáneo en Rusia y en otras partes del mundo, como las de conocidos artistas contemporáneos rusos como Ilya Kabakov, Aleksandr Kosolapov, el grupo “Narices Azules”, Aleksandr Savko y Mikhail Roginskii.

El material expuesto abarcaba desde obras creadas durante la época soviética hasta piezas del siglo XXI. En algunas de ellas se utilizaban motivos religiosos, como iconos o pinturas de escenas religiosas, mientras que otras empleaban un lenguaje no normativo.

Al presentar los cargos, el fiscal del distrito de Taganskii afirmó que la exposición iba “claramente dirigida a expresar manifiesta y visiblemente, una actitud denigratoria e insultante hacia la religión cristiana en general y la fe ortodoxa en particular”.

Yurii Samodurov afirmó: “El mundo moderno no podría existir sin el arte moderno. Y el idioma del arte moderno es tan importante como el de las noticias. Para mí, son los dos idiomas en los que se expresa la cultura: el idioma de las noticias para la protección de los derechos y libertades, y el del arte moderno para la protección de la libertad espiritual del ser humano”.

Rusia es un estado laico bajo cuyas leyes toda persona tiene garantizada la libertad de profesar una religión o de ejercer el ateísmo y puede elegir, tener o difundir libremente ideas religiosas o ateas.

El derecho internacional de los derechos humanos no permite, y menos aún exige, la restricción o prohibición de la libertad de expresión por el mero hecho de que haya quien encuentre ofensivos los puntos de vista expresados. Ni tampoco permite que se limite la expresión de opiniones o creencias alejadas de las creencias religiosas de la mayoría de la población o de la religión prescrita por el Estado.

Amnistía Internacional ha pedido a las autoridades de Rusia que respeten el derecho a la libertad de expresión y pongan fin a las acciones penales emprendidas contra Yurii Samodurov y Andrei Yerofeev.