Hace cinco años, el gobierno de Bachar al Asad reprimió brutalmente las protestas multitudinarias que comenzaron el 15 de marzo de 2011. La violenta respuesta desencadenó el conflicto armado más grave de la región.
1. Más de 250.000 personas han perdido la vida de manera violenta, según la ONU. Los crímenes de guerra y los crímenes contra la humanidad son práctica generalizada.
2. Desde entonces, más de 11 millones de personas se han visto obligadas a abandonar sus casas, incluidos alrededor de siete millones de personas dentro de Siria y más de cuatro millones que actualmente se refugian en el extranjero, la mayoría en Turquía, Líbano y Jordania. Decenas de miles de personas refugiadas sirias también han huido a Europa, a menudo arriesgando sus vidas en el proceso.
3. Las fuerzas gubernamentales han bombardeadoreiteradamente zonas civiles empleando armas de efectos indiscriminados, como bombas de barril. También han bombardeado hospitales, han dirigido sus ataques contra profesionales de la salud y han sometido áreas controladas por la oposición a largos asedios, privando a la población de alimentos, medicinas y otros artículos básicos. Según Physicians for Human Rights, 112 centros médicos fueron atacados sólo en 2015, la mayoría por las fuerzas gubernamentales.
4. Según la Red Siria de Derechos Humanos, alrededor de 65.000 personas han sido arrestadas por las fuerzas de seguridad del gobierno y se hallan actualmente en paradero desconocido en una red de centros de detención no oficiales. Otras han sido encarceladas por ayudar a personas que se han visto obligadas a huir de sus casas debido a los combates o por expresar sus opinión sobre la situación en Siria. Profesionales del derecho, la medicina y el periodismo han sido encarcelados simplemente por hacer su trabajo.
5. Los servicios de inteligencia y otras fuerzas gubernamentales continúan empleando la tortura a una escala masiva. Miles de personas han muerto bajo custodia desde 2011 debido a la tortura y otros factores, como la falta de alimentos y de acceso a atención médica.
6. El grupo armado autodenominado Estado Islámico ha bombardeado zonas civiles y matado a decenas de civiles y presos. El grupo ha secuestrado, torturado y ejecutado a periodistas, activistas pacíficos y otras personas consideradas opositoras. El Estado Islámico también asedia áreas civiles, lo que conlleva que la gente tiene dificultades para conseguir alimentos, suministros médicos y otros artículos básicos.
7. Otros grupos armados, incluido Yabhat al Nusra, también han atacado zonas civiles, han secuestrado a personas que consideraban opositoras y han matado a personas cautivas.
8. Los ataques aéreos rusos en apoyo al gobierno de al Asad han matado a cientos de civiles y han impactado en centros médicos.