Tarek Hussein, defensor de los derechos humanos y abogado, lleva más de un mes detenido arbitrariamente, bajo custodia de las fuerzas de seguridad egipcias, a pesar de que el fiscal decidió que fuera puesto en libertad con fianza el 18 de junio. Ha pasado 12 días recluido en régimen de incomunicación. Es preso de conciencia.