El activista Alaa Abdel Fattah, que tiene doble nacionalidad egipcia y británica y que permanece en huelga de hambre desde el 2 de abril, está en riesgo inminente de perder la vida. Intensificó su huelga de hambre el 1 de noviembre dejando de ingerir las 100 calorías diarias que había estado consumiendo. En lo que tanto él como su familia consideran el último intento por lograr su libertad, Alaa Abdel Fattah anunció su decisión de dejar de beber agua el 6 de noviembre, momento de la inauguración de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP27) en la localidad turística egipcia de Sharm el-Sheij. Alaa Abdel Fattah, que ha pasado la mayor parte de los últimos nueve años privado de libertad, fue arrestado por última vez en septiembre de 2019.
Índice: MDE 12/6184/2022