El 30 de octubre por la mañana se desalojó el albergue PIKPA de Lesbos para personas refugiadas. Antes del desalojo, se trasladó a los menores no acompañados a Grecia continental. Las 74 restantes personas —entre adultos y familias con hijos e hijas— fueron trasladadas al pequeño campo de Kara Tepe, gestionado por las autoridades municipales de Lesbos.