En este documento, Amnistía Internacional evalúa la implementación de las recomendaciones formuladas a India en su anterior EPU, entre ellas la ratificación de la Convención contra la Tortura de la ONU, la prevención de la discriminación y la violencia contra las mujeres y las niñas, los miembros de minorías religiosas y de las castas y tribus reconocidas por la Constitución, los ataques contra periodistas y personas que defienden los derechos humanos, la prevención de la violencia religiosa y medidas para evitar el uso excesivo de la fuerza por agentes de las fuerzas de seguridad.