Hamid Farhadi, periodista de un diario independiente operativo en el exilio, fue detenido por el Ministerio del Interior talibán el 3 de septiembre de 2024. El 19 de septiembre —y sin haber tenido acceso a representación legal— fue condenado a dos años de prisión. El tribunal lo acusó de difundir a través de su labor periodística propaganda sobre la situación de las mujeres y las niñas en el país. El pasado 28 de marzo, sin ninguna explicación ni aviso previo, lo trasladaron de la cárcel de Pol Charkhi a la tristemente célebre prisión de Bagram.