El 9 de octubre, el Congreso Nacional del Paraguay aprobó la llamada #LeyGarrote, que pone en peligro el trabajo por los derechos humanos en el país. Esta ley incluye formulaciones excesivamente amplias y ambiguas que podrían incrementar el control sobre el trabajo de las organizaciones de la sociedad civil y dar lugar a restricciones arbitrarias. Exhortamos al presidente del Paraguay a que vete de inmediato esta ley a fin de defender y proteger el derecho a la libertad de asociación y el derecho a defender los derechos humanos.