Más de 30 mujeres sudanesas llevan detenidas de forma arbitraria y sin acceso a asistencia letrada desde el 12 de noviembre de 2012. Se encuentran en la prisión de Al Obeid, en la región central de Sudán, tras ser trasladadas desde Kadugli, Kordofán del Sur. No tienen acceso a la atención médica que necesitan y podrían correr peligro las vidas de varias de ellas.