Durante el último mes, mujeres recluidas en la prisión de Gabiley se han quejado de actos de violencia sexual, incluida la violación, y otras formas de tortura y malos tratos infligidos por los guardias varones en la prisión. Las mujeres guardias que denuncian estos incidentes a las autoridades penitenciarias temen represalias. Las reclusas están expuestas a sufrir nuevos actos de tortura y otros malos tratos durante su reclusión.