El Parlamento y el gobierno de Ghana deben desistir con carácter inmediato de considerar el proyecto de Ley de Promoción de los Derechos Sexuales Humanos Adecuados y los Valores de la Familia Ghanesa de 2021. El proyecto de ley vulnera los principios de igualdad y no discriminación, el derecho a la libertad de expresión y de asociación, el derecho a la intimidad, así como la prohibición de la tortura consagrados en la Constitución de Ghana de 1992 y los tratados internacionales de derechos humanos ratificados por el país.