El 29 de septiembre, el Tribunal de Apelación de Ngozi confirmó la sentencia condenatoria y la pena de cinco años de prisión impuesta al abogado burundés Tony Germain Nkina. Fue detenido el 13 de octubre de 2020 y acusado de poner en peligro la seguridad interna del Estado. El 15 de junio fue declarado culpable de “colaboración con rebeldes que atacaron Burundi”. No obstante, las pruebas presentadas en su contra indican que su procesamiento es de motivación política y se debe a su labor previa de derechos humanos. Amnistía Internacional pide su libertad inmediata e incondicional.