Un empleado de tienda conocido por su apodo, Toke Dan, de la provincia de Aceh, fue detenido por soldados el 20 de agosto. Toke Dan está retenido en un centro comunitario y no ha podido ver a sus familiares ni hablar con un abogado. En Aceh, la tortura de los detenidos a manos del ejército es algo habitual y se teme mucho por la seguridad de Toke Dan.