Un activista agrario, dirigente de un grupo de familias sin tierra que han ocupado una hacienda en el nordeste de Brasil, ha sido muerto a tiros por un pistolero estrechamente relacionado con el propietario de la hacienda. Las otras personas citadas en el encabezamiento han recibido reiteradas amenazas de muerte, y se cree que sus nombres han sido incluidos en una lista negra.